Política

Aunque se vistan de seda, antipeatonales se quedan

Hace unos días el Gobierno Municipal de Mérida dio a conocer algunas de las acciones que realizarán en coordinación con el Gobierno Estatal respecto al Programa Conjunto de Mejora a la Movilidad Urbana y la Infraestructura Vial, el cual forma parte de la Agenda 2050.

Entre ellas se encuentran el desarrollo de intersecciones seguras, pavimentación de vialidades, instalación de semáforos inteligentes, repavimentación de un periférico y la instalación de algunos puentes “peatonales”.

Lo entrecomillo debido a que, como ya lo había mencionado en algunos textos anteriores, los puentes conocidos como peatonales, no lo son y, aunque el puente del que les hablaré hoy puede parecer que sí lo es debido a su diseño y tecnología, sigue siendo parte de la infraestructura deficiente que erróneamente la gente y las autoridades siguen considerando como peatonal.

En las imágenes que publicaron las autoridades yucatecas destaca precisamente el diseño vanguardista de uno de los puentes antipeatonales que van a instalar.

Se observa con un diseño que seguramente está basado en las texturas y colores que preponderan en la ciudad y que, además, se muestra que contará con elevadores por aquello de la accesibilidad.

Estoy segura que muchos de los que ya vieron la noticia se dejarán convencer por el diseño; pero no se dejen engañar. Aunque el puente o los puentes de este tipo cuenten con elevadores, no dejan de ser inseguros, insostenibles, injustos y antipeatonales, pues el mensaje sigue siendo el mismo: los peatones le estorban a los automovilistas, quienes con este tipo de infraestructura seguirán conduciéndose a altas velocidades.

Tampoco dejemos de lado que los elevadores solucionarán el factor de la accesibilidad solo por el tiempo que estos funcionen y hasta que la voluntad política quiera, pues una vez que se les deje de dar mantenimiento, haya fallas eléctricas o dejen de funcionar, las personas que lo tengan que utilizar se verán en la necesidad de hacer uso de las escaleras o rampas, volviéndolos inaccesibles como la mayoría de sus homólogos.

Por eso es importante que no nos deslumbremos por algo que parece bueno, pero no lo es. Aunque nos lo vendan como la panacea y nos quieran obligar a utilizarlos, la verdad es que este tipo de infraestructura nunca resolverá ni atenderá los problemas de movilidad peatonal, al contrario, solo los agudiza más al perpetuar el mensaje de que las y los viandantes “estorbamos” a los automovilistas.

El problema es que las autoridades mexicanas en general siguen convencidas de lo contrario y lo demuestran al promover obras de este tipo, insistiendo en invertir en proyectos obsoletos que solo benefician a unos cuantos, mientras que la mayoría de los mexicanos, quienes se mueven a pie o en transporte público, continúan siendo vulnerados en las calles.

Con este caso en particular podremos ver que, aunque nos los “vistan de seda”, seguirán siendo la misma infraestructura anti peatonal que ni siquiera está pensada en quienes se supone que debe proteger, ya que a la larga los puentes antipeatonales se vuelven lugares propicios para asaltos e intentos de abuso, o espacios que vulneran a las personas con discapacidad.

Google news logo
Síguenos en
Marcela Brown
  • Marcela Brown
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.