1. PATRONES DE PENSAMIENTO.
Posee inteligencia interpersonal, entendida ésta como facilidad para percibir los estados de ánimo, las motivaciones y sentimientos de los demás y así inducir a que sigan una determinada acción.
También posee inteligencia intrapersonal, es decir, posee la habilidad para conocer sus propios estados de ánimo interior, la comprensión y manipulación de sus fortalezas y debilidades a su favor ante los demás.
2. PATRONES PARA PERCIBIR LA REALIDAD.
Muy sensible e intuitivo.
Marcada necesidad de ternura, atención y aprobación.
Egocéntrico.
Su personaje totémico podría ser “gordolfo gelatino”
3. PATRONES DE SENTIMIENTOS GUARDADOS.
De modales refinados para compensar sus carencias internas.
Manipula para lograr que lo amen y encubrir su vacío y soledad interna.
Proclividad al drama y a la inestabilidad en los estados de ánimo, es muy depresivo.
Guarda fuertes resentimientos hacia el progenitor.
A la progenitora la maneja bien.
4. PATRONES HACIA EL TRABAJO Y LAS FINANZAS.
Muy creativo, se le facilitan las artes escénicas y escribir historias dramáticas y románticas.
Es histriónico.
5. PATRONES DE LIDERAZGO.
Fuerte necesidad de llamar la atención.
Su autoestima depende de la valoración que le otorguen los demás.
Es fácilmente influenciable y manipulable por “amigos” y circunstancias.
6. PATRONES DE EXPRESIÓN.
Sobresaliente capacidad persuasiva verbal.
Su estilo de alocución es sobradamente impresionista, sin detalles.
De ira y rabia contenida.
Tiende a un tipo de comportamiento seductor algo inapropiado.
Recurre a su apariencia física y a la vestimenta para llamar la atención de los demás.
7. PATRONES PARA ENFRENTAR LOS RETOS Y CONFLICTOS.
Está convencido de que es especial, pero incomprendido por el mundo.
Busca atención a través de manifestar algún padecimiento.
Manipulador, se deja caer para que lo levanten.
Culpabiliza a los demás para evitar la propia culpa.
Tiende a menospreciar a los que aparecen como exitosos.
El odio y el deseo de venganza son su motor de vida.
Cierta dificultad para distinguir entre el bien y el mal.