Voy en contrasentido de muchas, muchísimas personas, pero me parece que hemos exagerado el tema del joven que cerró el paso en el Puente Matute Remus, y grabó ese momento para subirlo a sus redes sociales, donde el Fofo Márquez es más que famoso.
Por supuesto que me parece que lo hecho por el joven regiomontano y sus amigos es un acto irresponsable, pero también me parece que se le cuestiona por dos motivos: por ser ajeno a la ciudad y al estado; y por haber alardeado de su (presunto) poder y dinero.
Estoy seguro que la extravagancia subida a redes no duró más de unos 30 segundos, y de que se hizo en una hora con poco tránsito. Y que fue arriesgada, porque un despistado pudo haberse estampado contra los autos exóticos, pero no más.
El agravio, insisto, fue porque el chaval no es local, sino proveniente de un estado que rivaliza con Jalisco en muchos aspectos, y por eso los que vivimos en este terruño nos sentimos insultados. Pero fuera de eso, de veras creo que hemos inflado el tema.
Ya anoche el alcalde Pablo Lemus dijo que su equipo de trabajo está buscando al joven para llegar a un arreglo compensatorio, sin especificar detalles. Eso me parece lo correcto. Más que satanizar la peripecia del muchacho, había que buscarlo para que hiciera lo que en parte ya hizo: disculparse. Y tal vez aquí en Guadalajara tener una charla con jóvenes, o grabar uno de sus videos en la capital jalisciense para hablar sobre sus experiencias y aprovechar para mandar un mensaje sobre prevención de accidentes, o algo así.
Pero tal vez amanecí con lo contreras en la cabeza, porque a lo largo del día me encontré a detractores del chavo, su video, su (mala) aventura, y sus desplantes. Y me siento como el borracho del chiste en el que viaja en sentido contrario, y se sorprende de tanto pentonto que maneja en contrasentido... y para mi colmo: sobre el puente Matute Remus. Ni modo. Hay días así.
El banquillo
Cada vez que llueve como anoche, me pongo a pensar en toda el agua que se va al drenaje.
Manuel Baeza
Twitter: @baezamanuel