Pareciera que en la región lagunera a quienes gustan de disfrutar de las bebidas espirituosas poco les importa la pandemia, lo mismo a aquellos que gustan de circular a toda velocidad en sus vehículos, ya que los accidentes viales se siguen presentando diariamente, algunos de fatales consecuencias.
En las noches o por las madrugadas, conductores o conductoras en estado de ebriedad han protagonizado choques contra otros vehículos y por su estado alcoholizado, se han estrellado contra muros o barras de contención, se han llevado señaléticas, tumbado postes de energía y hasta semáforos, resultando en muchas ocasiones lesionados al igual que sus acompañantes.
Se ha dicho hasta el cansancio que se queden en casa, lo cual en la región lagunera no ha sucedido, ya que muchos siguen saliendo a los diferentes restaurantes, antros o bien se van a alguna reunión en una casa particular, en donde no guardan la sana distancia, pero si le dan gusto a la garganta ingiriendo alcohol a raudales, por lo que el problema viene cuando regresan a sus hogares ya en estado de ebriedad y es cuando vienen los accidentes viales.
En los últimos días, muchos motociclistas o ciclistas han sido víctimas de los cafres del volante, por lo que han sufrido las consecuencias y participado en choques, en los cuales sufren lesiones que les dejan secuelas de por vida.
Hay operativos para detectar a conductores alcoholizados, pero ni así la gente deja de manejar con algunas copas de más en su cuerpo, exponiéndose a ser detenidos, a sufrir algún accidente o bien, provocar que terceros sufran las consecuencias.
Las autoridades están haciendo su parte y la verdad que muchos no entienden del peligro que representa la combinación de alcohol y volante.
Los contagios continúan, los decesos igual, pero lo malo es que las reuniones también, como el pasado fin de semana en que muchos acudieron a disfrutar con una buena carne asada el Super Bowl.
Ahora viene el día del Amor y la Amistad, el cual habrá de caer en domingo, por lo que las autoridades tanto de Durango como de Coahuila, piden festejarlo en familia y no salir de sus casas.
Conociendo a los laguneros, esto es algo difícil de lograr.