Cada ocasión en que hay Juegos Olímpicos, los mexicanos participan con mucha enjundia, buscan por todos los modos traer medallas de cualquier color, sea de bronce, plata u oro.
A veces no salen las cosas como se quiere, como se planean, pero lo mejor, es que siempre llegan preseas y las festejamos con mucho gusto en tierras aztecas.
Pero en diferentes eventos, como en el pasado mundial de futbol en Qatar, hay mexicanos que no desaprovecharon la oportunidad y es que saben que el conjunto tricolor difícilmente pasaría de ronda, lo cual no les preocupaba ni los acongojaba, ya que ellos fueron a divertirse y lo hicieron en gran manera.
Todavía se recuerda a un sujeto que llevaba una bocina amarrada a la espalda y en donde quiera que se detenía en espera que otros connacionales le hicieran segunda, de inmediato la hacía sonar con música pegajosa, con canciones como La Chona y muchas otras, las cuales causaban mucho entusiasmo entre los asistentes de diferentes países a la justa deportiva.
Ahora en París, en estos momentos van dos preseas, una de bronce y una de plata, las cuales han sido muy festejadas por los mexicanos, pero en donde se han llevado los aplausos que valen oro, plata y bronce, es en ambiente, ya que muchos aztecas que viajaron a la ciudad luz, simplemente han puesto el ambiente, ya que con pocos que se reúnan, echan a andar sus mejores pasos con la canción Payaso de Rodeo.
Pero además, en un momento determinado que se encontraban bailando, llegaron policías franceses para disfrutar de la música mexicana y tras tomar fotos del momento, los aztecas decidieron cantarles la de “Hermano cayó la ley, está rodeada tu casa”, en alusión a los uniformados, quienes no sabían lo que decía la letra y solamente disfrutaban el momento.
Se espera que sigan llegando más mexicanos conforme pasan los días en París, para que la diversión no pare, pero además, también hay confianza en que los atletas de nuestro país, puedan hacer un buen papel y en las pruebas restantes se cuelguen medallas no solamente de plata o bronce, sino de oro.
