Todavía es fecha en que muchos no acaban de entender para qué instalar una megafarmacia por parte del gobierno federal, cuando lo principal debe ser el surtir las farmacias del sector salud, del IMSS, del Issste, en todo el territorio nacional.
No cabe duda que esa idea de la farmacia que habrá de contar con todos los medicamentos que hay en el mundo, debió haber salido de la mente de Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México o bien, de alguno de sus asesores.
Al Mandatario de la Nación parece que le ha faltado sensibilidad, cuando él debe de saber que en las farmacias de los hospitales del país, simplemente mucho del medicamento que recetan los doctores no se encuentra en existencia.
Como también de recordar que muchos niños con cáncer, ya no volvieron a surtir sus recetas.
Pero parece que al Ejecutivo de la Nación no le están informando lo que realmente sucede en los nosocomios de todo el país, en los cuales los derechohabientes tienen que hacer largas filas, para esperar a que les surtan a medias sus recetas, al no contar con el suficiente medicamento.
No le han dicho al Presidente López Obrador que los mismos derechohabientes tienen que protestar para que sean atendidos, tienen que llegar a bloquear calles para que les hagan caso y les puedan surtir sus recetas.
Quiénes habrán de utilizar esa megafarmacia, quiénes pedirán medicamentos, cuando se sabe que la misma apenas tiene paracetamol y algunas cuantas medicinas.
Pero también se sabe que el burocratismo está presente, que el teléfono que dieron para pedir información, en ocasiones no lo contestan y si se pide que le surtan una receta, los que recibieron la llamada le dicen que en tres horas le resolverán.
De verdad que lo mejor es que surtan todas las farmacias del país, en lugar de hacerles perder el tiempo a las personas que necesitan con urgencia los medicamentos.