Hoy quiero escribirles esta carta a todas aquellas personas, quienes han tenido que atravesar por situaciones límite.
La pérdida de un amigo, la muerte de un ser querido, la fractura repentina de una brillante carrera profesional.
Quiero escribirles esta carta a aquellas personas, quienes por alguna u otra razón han sido víctimas del abuso, la traición y la desventura.
A todas aquellas mujeres y hombres quienes de pronto han tenido que ser tan valerosos ante la adversidad.
En ocasiones pareciera que la vida te lo ha ido quitando todo, todo y que de pronto no te ha quedado otra cosa sino tu propia desnudez.
Solo tu piel y una pluma para escribir y en él escribes, en él pintas y así dejas tatuado en tu piel un poema de amor, una canción de protesta, un grito desesperado de dolor, una carta de amor y una voz de esperanza.
Y tarde que temprano la muerte nos pillará a todos, a ti, a mí, al poeta, al rey, al loquito del barrio, al mago y al profeta… tarde que temprano, a todos nos cargará la calavera.
Pero por hoy, poeta amigo mío…amiga que se me ha entregado su cariño sin condiciones. Por hoy ¡Celebra la vida…porque aún no te has muerto!
