En la actualidad el cambio climático y los fenómenos meteorológicos extremos —como las inundaciones, huracanes y olas de calor— son cada vez más frecuentes e intensos. Frente a esta realidad, han surgido plataformas tecnológicas que no sólo permiten anticipar y mitigar sus efectos, sino también informar en tiempo real a gobiernos, comunidades y ciudadanos. Este avance está estrechamente vinculado a un nuevo fenómeno de inmediatez, en el que el acceso rápido y preciso a la información puede marcar la diferencia entre el riesgo o la prevención y la seguridad.
El acceso a la tecnología también ha influido en este fenómeno, generando un amplio abanico de opciones para recopilar información, evidencias y documentar sucesos que antes se transportaban mediante recuerdos. Esta participación activa genera una avalancha de información que exige un compromiso de verificar la información para destacar aquella que provenga de fuentes confiables. Así, la inmediatez amplía el panorama informativo y transforma el entorno digital en un espacio esencial para cubrir múltiples fenómenos, incluidos los climáticos, con responsabilidad y rigor.
Esta dinámica se complementa con el papel de las plataformas digitales, que tienen la capacidad de ofrecer comunicación inmediata y están transformando la manera en que los ciudadanos se informan. Por ello, el acceso a información confiable y en tiempo real se ha vuelto un recurso vital. Según el Digital News Report 2025 de Reuters, en México casi 80% de los usuarios utilizan redes sociales para enterarse de las últimas noticias. No obstante, este nuevo entorno también plantea desafíos importantes, como el combate a la desinformación y la necesidad de fomentar una cultura de prevención, donde la tecnología y la comunidad trabajen de forma conjunta y consciente.
Dado el aumento en la demanda de información, las plataformas digitales deben tomar una responsabilidad cada vez mayor en la gestión de grandes cantidades de contenido. Algunas plataformas, por ejemplo, moderan sus contenidos a nivel mundial. Si un video infringe los Lineamientos de la Comunidad (como contenido sensible, o desinformación sobre desastres naturales, salud o clima), podría ser eliminado, desmonetizado o penalizado.
En el primer trimestre de 2025, la mayor plataforma eliminó 2.3 millones de videos con contenido engañoso, spam o estafas para proteger a la comunidad. La plataforma ha mejorado herramientas como son los estantes de información, estos destacan contenido de medios verificados y fuentes editoriales adicionales. Además, iniciativas como “Alertas de calor extremo” o Flood Hub, y servicios de alerta móvil gubernamentales, forman parte de una infraestructura de protección para usuarios.
La inmediatez es una herramienta poderosa, informarse en casos de desastres naturales, emergencias o imprevistos puede salvar vidas, y hacerlo desde canales oficiales, confiables y verificados es hoy un acto de responsabilidad colectiva. En un mundo expuesto a crisis ambientales cada vez más frecuentes, debemos ver a la tecnología no como una solución aislada, sino como una herramienta que, bien utilizada, puede fortalecer el tejido social y proteger a las comunidades expuestas. La prevención empieza con un click bien informado.