13 años. Una Liga representa más que un título, se trata del campeonato que explica la tenacidad, regularidad, constancia, trabajo, estilo e influencia en el juego. La diferencia entre Premier League y Champions League es cosa del tiempo: para ganar la Premier hay que ser el mejor equipo durante todo el año, y para ganar la Champions hay que serlo en la mejor parte del año. Guardiola ha perdido la Champions en 11 de 13 intentos, pero muy pocos reconocen que lleva 10 Ligas ganadas de 13 posibles en toda su carrera. Ganar 3 Ligas en España, 3 en Alemania y 4 en Inglaterra desde que es entrenador, le convierten en el mejor del mundo. Pero si hablamos de ganar 32 títulos en apenas 13 años, quizá nos encontramos frente al mejor entrenador de la historia.
48 horas. Madrid, Paseo de la Castellana: un control de policía cierra el tránsito en las calles colindantes al Santiago Bernabéu mientras un convoy de Audis color negro pasa por el estadio con indiferencia. Rodeado de agentes y policías que le escoltan con protocolaria distancia, el convoy transporta a los hombres del emir de Qatar, que se reunirá con la Corona y el Gobierno para cerrar un acuerdo de inversión para el sector energético español por 4 mil 700 millones de euros. Cuarenta y ocho horas antes de anunciar que Mbappé quedaba amarrado al PSG, Tamim bin Hamad Al Thani convertía el futuro del jugador en un asunto de Estado entre españoles, franceses y qataríes. Una cosa es renovación y otra retención.
90 minutos. El sábado, París recibirá uno de los mejores partidos que veremos antes del Mundial de Qatar. La medida reglamentaria para guardar este pedazo de futbol es de 90 minutos con agregados; 120 en caso de emergencia. Almacenar al Real Madrid y al Liverpool, fundados hace más de un siglo y con 20 Copas de Campeones de Europa en conjunto, sin importar dónde caiga la próxima, es imposible. Cuando tanta historia coincide en tan poco espacio, el futbol se convierte en una emocionante bomba de tiempo. Sálvese quien pueda.
José Ramón Fernández Gutiérrez de Quevedo