“Es un animal. Es la cosa más malvada que nunca imaginé”, fueron las palabras del familiar de una de las víctimas de Glen Rogers, cuando en 1997 fue sentenciado a morir mediante inyección letal.
Rogers era un hombre de carácter irascible que presumía tener muchas mujeres. De hecho, la prensa de la época lo bautizó con varios apelativos, entre ellos el de El asesino Casanova.
Quienes conocieron a Rogers sabían que tenía un temperamento que explotaba a la menor provocación, por lo que sospechaban que era capaz de matar.
Las sospechas pronto se confirmaron. Aunque las autoridades no lo pudieron comprobar, había elementos que inculpaban a Rogers cuando el 10 de enero de 1994 la policía irrumpió en una cabaña de Beattyville, Kentucky, donde descubrió el esqueleto de Mark Peters atado a una silla. Peters, de 71 años, había compartido su casa con Rogers.
Las víctimas siguientes de Rogers fueron mujeres. Sandra Gallagher, de 33 años, conoció a Rogers en un bar de Van Nuys, California, en septiembre de 1995. Al día siguiente, los uniformados hallaron el cuerpo, que mostraba la ira de un hombre que sentía placer al estrangular y quemar a sus presas.
En un nuevo escenario, Rogers asesinó en Jackson, Misisipi, a Linda Price, a quien conoció en un puesto de cerveza. El cuerpo de Price, de 30 años, fue hallado en la bañera de un motel.
A principios de noviembre de 1995, Tina Cribbs tomaba cerveza en un bar de Gibsonton, Florida. En el lugar trabó amistad con Rogers. Su cuerpo fue hallado en la bañera de un motel. Tenía huellas de haber sido apuñalado en pecho y glúteos. Los agentes recabaron de la escena las huellas dactilares de Glen Rogers.
La última víctima del asesino fue Andy Jiles Sutton, cuyo cuerpo apuñalado fue rescatado, el 9 de noviembre de 1995, en una cama de agua de un motel.
Glen Rogers no sólo alegó que su número de víctimas superaba la cifra de 70; también indicó que él había asesinado a Nicole Brown, la ex esposa del jugador de futbol americano O.J. Simpson.
Una vez detenido, Rogers enfrentó cargos por asesinato, incendio intencionado y robo de vehículos. El 11 de julio de 1997 fue declarado culpable y sentenciado a muerte. Fue ejecutado el 15 de mayo de 2025 en la Prisión Estatal de Florida.