Le urgía descanso a los jugadores habituales del equipo Santos Laguna luego de ocho juegos en las últimas cuatro semanas.
Jonathan Orozco, José Abella, Martín Nervo, José Juan Vázquez, Diego Valdés, Brian Lozano, Javier Correa y Julio Furch son los ocho jugadores constantes que ha utilizado Salvador Reyes tanto en el torneo de Liga Mx como en la CONCACAF Liga de Campeones.
Matheus Dória y Ayrton Preciado tuvieron que parar antes, debido a las lesiones que los afectaron en el trayecto y en el más reciente partido, ante Necaxa, se ausentó el portero Orozco.
En este núcleo de futbolistas se ha recargado la mayor parte del trabajo en el primer semestre del año. Entre Gerardo Arteaga y Jesús Angulo se han rotado la posición de lateral izquierdo mientras que Hugo Isaac Rodriguez ha cumplido con cubrir la ausencia de Dória.
A Ulises Rivas lo vimos en un partido frente a Cruz Azul en el cual se vio mejor en ataque que defendiendo. El resto de los elementos de banca nos han mostrado porque siguen como suplentes: Marlos Moreno, Déinner Quiñones, Brayan Garnica, Carlos Orrantia y Eduardo Aguirre no han ofrecido algo que permita pensar que van a desplazar a los titulares.
El equipo santista comienza a ser predecible en su juego y variantes. El entrenador de Necaxa, Guillermo Vázquez dio un ejemplo de lo anterior al decirle a sus futbolistas que ya sabía lo que tenía que hacer cuando ingresó Quiñones.
La defensa de los Rayos tampoco tuvo que modificar su parado de equipo en mediocampo en el transcurrir del partido. Esta situación aunada a la mala ejecución de las jugadas a balón parado están minando las posibilidades de la escuadra albiverde de ganar puntos. Todo esto se refleja en ganar una de las últimas nueve unidades que han disputado y que lo envió al décimo sitio.
Los volantes ofensivos han aportado poco en el actual torneo y esa es una debilidad que los equipos contrarios tienen detectada. El desgaste de dobles juegos seguirá dos semanas, al menos, con la semifinal de la CONCACAF Liga de Campeones en el inicio del mes de abril.
Por ello, espero que los jugadores santistas, quienes no acudieron a convocatorias de selecciones nacionales, en verdad descansen, porque para el cierre del torneo se necesitan cuatro triunfos o tres victorias y dos empates para calificar.
Y la atención de los aficionados laguneros estará puesta en la serie frente a Tigres y, hace apenas tres meses, vimos como se puso el ambiente tras la eliminación ante Rayados en liguilla.