
Hace unos días se le ocurrió a un inspirado, que visitaba sitios turísticos en Barcelona, hacer un video/selfie desde las escaleras eléctricas de una estación del Metro: apoyó el teléfono en un escalón y, conforme subía, iba apareciendo, detrás de él, la iglesia de la Sagrada Familia. Esta noticia que leí en el periódico y que contada así parece solamente la graciosa ocurrencia de un turista, desencadenó un fenómeno multitudinario, que dice mucho, y no muy bueno, del mundo en que vivimos. El video/selfie se convirtió, rápidamente, en la aspiración de miles de instagramers y tiktokers que, durante los siguientes días, atiborraron esas escaleras eléctricas para hacerse exactamente el mismo video/selfie, hasta que la policía municipal tuvo que intervenir y parar las escaleras para evitar un percance.
Este novísimo, y fugaz, reclamo turístico, tiene varias aristas, todas oscuras; las miles de personas que hicieron ese video/selfie no pretendían lograr una imagen interesante, sino hacer exactamente lo mismo que todos los demás, disolverse en el rebaño de la red social.
Me dirán, con razón, que eso es precisamente lo que han hecho los turistas desde que existen las cámaras fotográficas, fotos de los mismos paisajes, edificios y monumentos, pero convendrán conmigo en que no es lo mismo la foto destinada al álbum familiar, que la foto publicada para que la vean los seguidores pues esta, de entrada, quiere decir: yo estoy aquí y ustedes no. Los turistas que se hicieron este video/selfie más que divertirse querían ser advertidos, parecían más preocupados por demostrar dónde estaban que por estar ahí, lo cual reviste la experiencia de un triste lustre utilitario.
El viaje ha cambiado de objetivo, ya no se trata de viajar sino de que te vean viajando. Ya no se viaja, como en el siglo XX, para conocer, basta con fotografiarte en un lugar que ya otros encontraron por ti. Y mucho menos se viaja para encontrarse a uno mismo porque, para envidia de místicos y filósofos, tú si sabes perfectamente quién eres, de dónde vienes y hacia dónde vas: hacia tu cuenta de Instagram.