Que la caravana Viacrucis Migrante 2024 haya preferido dormir junto a las vías del tren en Puebla y no en los albergues que para ellos se destinaron dice mucho de la desconfianza que se tiene hacia las autoridades migratorias que les fallaron fuera y dentro del estado.
Entre los migrantes que hasta semana estuvieron en Puebla hay al menos 500 menores de edad que al dormir sin techo alguno quedan expuestos a la fauna nociva que se desarrolla en la maleza que crece a la vera de las vías férreas.
También van mujeres embarazadas y algunas personas que si bien no están en la tercera edad sí están en condiciones que no son las mejores para emprender un viaje que necesariamente será caminando.
Salieron de sus países aunque, como dijo una de ellas, «nunca pensé ser migrante, nunca fueron mis planes, pero mi madre y mi padre me alientan porque saben que la situación allá no es muy buena».
Entre ellos lo mismo hay médicos, enfermeras, ex futbolistas profesionales, trabajadores de maquila, albañiles, gente que lo único que busca es salir de las condiciones en las que sus gobiernos los obligan a vivir y si se resisten la única opción que tienen es migrar.
Migrar no es fácil: no se trata de agarrar una mochila e irse a la aventura, escribí en mi primera colaboración de este año. Y al estar esta semana cerca de la caravana de más de mil 500 personas que buscan cruzar en paz México para llegar a la frontera pude saber, además, que si aceptan dormir a un lado de los rieles de una vía férrea, con todos los peligros y la inseguridad que ello implica, es porque sus gobernantes han fallado en garantizarles salarios no precarios, en garantizarles seguridad ante la violencia y las pandillas.
Isaías, de El Salvador, es uno de ellos: dejó su trabajo en una fábrica de block, «porque la situación está jodida, no alcanza el sueldo». Sus ojos se llenan de lágrimas cuando recuerda que en su país se quedaron su esposa y su hijo de ocho años de edad. Él había comenzado su migración con otro grupo de personas, pero decidió unirse al Viacrucis Migrante 2024 «porque hay más seguridad».
Y flaqueó cuando a los cuatro días de estar en Puebla murió su hermano. «Quise regresarme», cuenta, pero «me acordé a que vine, por qué me vine… y aquí sigo». Lo mínimo que por ellos deberían hacer las autoridades mexicanas y poblanas en particular es no repetir contra ellos la inseguridad de la que vienen huyendo.
AL MARGEN
Cuentan en el bajo mundo notarial que la convocatoria para participar en el examen de oposición para obtener siete notarías disponibles es un mero trámite, que ya tienen dueño las notarías 53 del Distrito Judicial de Puebla; las 4 y 12 del Distrito Judicial de Cholula; la 2 del Distrito Judicial de Matamoros; la 8 del Distrito Judicial de Huejotzingo; la 14 del Distrito Judicial de Tehuacán y la 2 del Distrito Judicial de Zacatlán.