Con el anuncio del gabinete de Claudia Sheinbaum Pardo se han levantado diversas interrogantes sobre la configuración y las influencias presentes en su equipo de trabajo. En este análisis, analizaremos en tres aspectos: la relación de los miembros del gabinete con la UNAM, la cercanía política con AMLO y Sheinbaum, y la proporción de perfiles técnicos.
La UNAM: Semillero de Líderes
De los 20 integrantes del gabinete de Sheinbaum, diez tienen algún tipo de vínculo con la UNAM, ya sea porque ahí estudiaron o trabajaron. Entre ellos, Rosa Icela Rodríguez, Juan Ramón de la Fuente, Alicia Bárcena, Luz Elena González, Jesús Antonio Esteva Medina, Raquel Buenrostro, Marath Baruch, Edna Elena Vega, Claudia Curiel de Icaza, y Ernestina Godoy.
Lo anterior, refuerza la hipótesis de una red de profesionales formados en la UNAM que ahora ocupan puestos clave en el gobierno. Este grupo no solo destaca por su formación académica, sino también por su experiencia en la administración pública y su participación en proyectos estratégicos.
Incidencias políticas: AMLO vs. Sheinbaum
Analizando las cercanías políticas, se puede observar una clara influencia del presidente AMLO en el gabinete de Sheinbaum. De los integrantes, al menos diez tienen una conexión directa con AMLO, habiendo trabajado con él en diferentes momentos o etapas. Este grupo incluye a Rosa Icela Rodríguez (ha colaborado con CSP), Juan Ramón de la Fuente, Rogelio Ramírez de la O, Ariadna Montiel, Alicia Bárcena, Raquel Buenrostro, Mario Delgado, Marath Baruch, Marcelo Ebrard, Edna Elena Vega y Lázaro Cárdenas Batel.
Por otro lado, figuras como Omar García Harfuch, Ernestina Godoy, Luz Elena González, Jesús Antonio Esteva, y Claudia Curiel de Icaza, muestran una mayor cercanía con Sheinbaum, reflejando la continuidad y confianza en su gestión y estilo de liderazgo.
Perfiles técnicos: formación y experiencia
Un aspecto destacable del gabinete es la presencia de perfiles técnicos, definidos por su formación académica y experiencia en el sector público. De los 20 integrantes dados a conocer, siete tienen estudios de licenciatura, ocho con maestría y cinco con doctorado en áreas relevantes. Por ejemplo, Rogelio Ramírez de la O tiene un doctorado en Economía de la Universidad de Cambridge; Edna Vega lo estudió en la UNAM y David Kershenobich tiene un doctorado en Medicina de la Universidad de Londres.
Esta configuración sugiere un enfoque en la profesionalización y especialización técnica, lo que podría traducirse en una gestión más eficiente y bien informada de las políticas públicas.
Centralización del poder: La CDMX como núcleo
Un punto crítico es la centralización del poder en perfiles provenientes de la Ciudad de México o con carreras políticas desarrolladas en esta ciudad. Excepto por Josefina Rodríguez Zamora, secretaría de Turismo y originaria de Tlaxcala, el resto del gabinete tiene fuertes lazos con la capital del país. Esto podría interpretarse como una limitación a la diversidad regional, excluyendo potenciales aportes de profesionales y técnicos del interior del país.
El gabinete de Sheinbaum destaca por su fuerte vinculación con la UNAM, la notable influencia de AMLO y la prevalencia de perfiles técnicos. Sin embargo, la centralización en la Ciudad de México plantea preguntas sobre la inclusión y representación regional en el gobierno. Este análisis sugiere que, aunque la profesionalización y la continuidad política son aspectos positivos, la diversidad y la descentralización podrían ser áreas a mejorar para un gobierno más inclusivo y representativo de todo México, quizás en puestos clave del gabinete ampliado.
