Política

Poder y periodismo

Escuchar audio
00:00 / 00:00
audio-waveform
volumen-full volumen-medium volumen-low volumen-mute
Escuchar audio
00:00 / 00:00

Repantigado en el mullido sillón del amplísimo estudio, Gil cavilaba. Y leía y trataba de entender algo de su país: la nueva secretaria de Prensa de la Casa Blanca del gobierno Biden, Jen Psaki, fue comentarista de medios como CNN y The Hill. Antes, fungió como directora de Comunicación de la administración Obama entre 2015 y 2017, así como vocera del Departamento de Estado (el equivalente a la cancillería mexicana) también durante el gobierno de Obama entre 2013 y 2015. Fue la secretaria de prensa de la campaña presidencial de Barack Obama en 2008.  

Psaki dirigió su primera conferencia de prensa el 20 de enero. Oigan esto y no se sientan tan miserables como Gil: “Buenas tardes a todos. Gracias por unírsenos en este día histórico. Es un honor estar con ustedes. Cuando el presidente me pidió servir en esta función, hablamos de la importancia de traer la verdad y la transparencia de vuelta a las ruedas de prensa. Me pidió asegurar que comuniquemos las políticas de la administración Biden-Harris y el trabajo que su equipo desempeña cada día en beneficio del pueblo estadounidense (…) Habrá ocasiones en que veamos las cosas de modo distinto en esta sala, quiero decir entre nosotros (los reporteros y ella). Eso está bien, es parte de nuestra democracia. Reconstruir la confianza del pueblo americano será el componente central de nuestro enfoque en la Oficina de Prensa y en la Casa Blanca cada día”.

Jesús, mira la onda

¿Les suena familiar? Igual que aquí, así pasa; ah, copiones, se decía en el patio escolar: “Déjame decir, Zeke (refiriéndose al reportero de The Associated Press que le hizo una pregunta), que vengo a este podio habiendo servido anteriormente tanto en la Casa Blanca como en el Departamento de Estado, fui la vocera allá, y he recorrido el mundo en viajes para promover la democracia, donde vi el poder de Estados Unidos y, por supuesto, el poder de este podio, así como el poder de la verdad y la importancia de establecer un ejemplo de compromiso y transparencia”.

¿Oíste, Jesús?

Madres, y recontra madres, si Jesús salió del covid, cosa que desea Gil, debería leer estas declaraciones: “Solamente voy a pronunciarme porque me diste la oportunidad. Tengo el más profundo respeto por el papel de la prensa libre e independiente en nuestra democracia, así como el rol que todos ustedes desempeñan”.

Ahora vea el manejo de la diferencia, del desacuerdo: “Como dije antes, habrá momentos en los que nos encontremos en desacuerdo y habrá días en los cuales, incluso, nuestro desacuerdo cubrirá una extensa parte del contenido de la conferencia de prensa. Pero tenemos una meta común, la de compartir información precisa con el pueblo estadunidense”.

Ya en serio, podríamos tener una actitud similar en lugar de ofender, insultar, agraviar, burlarse de los periodistas críticos al régimen de Liópez Obrador: “Si el presidente estuviera parado aquí conmigo, les diría que él trabaja para el pueblo estadunidense. Yo trabajo para él y también para el pueblo estadounidense. Pero su objetivo y su compromiso será traer transparencia y la verdad de vuelta al gobierno, compartir la verdad aún si es dura o difícil de escuchar. Eso es algo que yo tengo la esperanza de lograr en esta función”.

Oíd, autores de la mañanera: “Creo que hay varias formas de combatir la desinformación. Una de ellas es la información precisa acompañada de datos verificables y reales, así como compartir información aún si es difícil de oír, aún si no cumple las expectativas de la gente en casa, naturalmente desesperada porque esta crisis concluya”.

De acuerdo con The New York Times, “a diferencia de Sean Spicer, el primer secretario de Prensa de Trump, quien injuriaba a los medios de comunicación y mintió sobre el tamaño de la multitud en la toma de protesta de Trump desde su primera conferencia de prensa, la señora Psaki se involucró en un intercambio de información muy civilizado con los reporteros”.

Todo es muy raro, caracho. Como diría Enrique Tierno Galván: “El poder es como un explosivo: o se maneja con cuidado, o estalla”.


Gil s’en va
[email protected]

Google news logo
Síguenos en
Gil Gamés
  • Gil Gamés
  • [email protected]
  • Entre su obra destacan Me perderé contigo, Esta vez para siempre, Llamadas nocturnas, Paraísos duros de roer, Nos acompañan los muertos, El corazón es un gitano y El cerebro de mi hermano. Escribe bajo el pseudónomo de Gil Gamés de lunes a viernes su columna "Uno hasta el fondo" y todos los viernes su columna "Prácticas indecibles"
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.