Sociedad

¿Oveja perdida?

  • Siete puntos
  • ¿Oveja perdida?
  • Francisco Gómez

1. Había una vez un pastor que tenía 100 ovejas. El rebaño era muy plural, pues estaba compuesto por amas de casa y ejecutivas de negocios, deportistas profesionales y amateurs, empresarios y obreros, profesores y alumnos, médicos y enfermeras, clérigos y seminaristas, etcétera. Tenían, sin embargo, dos cosas en común: todas las ovejas eran católicas, muy católicas, y heterosexuales, salvo una, que era gay.

2. Lesby era su nombre. O, más bien, así le decían. Desde niña batalló para aceptar su condición, pues pronto se le notó. Su madre la aceptó a regañadientes, pero su papá no, y murió rechazándola por marimacha. Varias veces se peleó en la escuela con compañeras que la insultaban, pero lo que más le dolió fue cuando se burló de ella la catequista. Nunca imaginó que en la misma Iglesia la estigmatizarían.

3. Pero el pastor no la hacía menos, por el contrario. Tenía hacia ella muestras de sincero cariño, y siempre la llamaba con un respeto que le salía del corazón. Aunque el resto del rebaño la miraba con desdén y no desaprovechaban oportunidad para desairarla, Lesby se mantenía en el grupo, más por el genuino aprecio de su líder que por sus ovejas compañeras, muy católicas, pero muy groseras.

4. Cierto día, el pastor convocó a su rebaño para ofrecerle un banquete. Creó una comisión que se encargara de los preparativos y poco a poco se fue armando el evento. Habría una misa de agradecimiento, con flores y coro monumental, y se remataría con una cena de gala, meseros de guantes blancos incluidos. Llegó el día y el pastor notó con tristeza una ausencia: faltaba Lesby.

5. Preguntó por ella y le dijeron, no sin cierta sorna, que dada su condición a lo mejor no quería asistir o, lo que también era probable, como se despistaba con frecuencia de seguro se había perdido. El pastor salió a buscarla de inmediato y, preocupado, recorrió hospitales pensando que Lesby había sufrido un accidente. Por fin la encontró, pero sentada en la banca de una plaza, bebiendo café.

6. “¿Por qué no estás en el banquete?”, indagó su mentor. “Porque nadie me invitó”, contesto ella. La abrazó protector y, de la mano, la condujo al salón en donde se celebraba la cena. Al llegar a la reunión y con el asombro de las demás ovejas, el pastor pidió la palabra: “Les informo con gran alegría que encontré a Lesby. Pero: atención, no estaba perdida, sino que no había sido invitada, incluida”.

7. Cierre ciclónico. ¡Qué curioso! Germán Martínez renunció por lo que muchos consideramos una medida neoliberal, impulsada por el gobierno de AMLO: la reducción de apoyo a políticas públicas de salud. Obviamente, el Presidente lo negó. Ahora resulta que el secretario de Hacienda dejó su puesto por mantener el neoliberalismo de regímenes anteriores, según López Obrador. ¡Qué curioso!

[email protected]

Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.