Echemos otro vistazo a las obras que han contribuido en la conservación de los principales sucesos de la historia de este encuentro deportivo, a manera de minimaratón “filmiolímpico”...
Para completar este maratón echamos otro vistazo a obras que han contribuido en la conservación de los principales sucesos de la historia de este encuentro deportivo. Jean-Claude Lebrecque dirigió Juegos de la XXI Olimpiada (1977), filme oficial de la celebración en Montreal 1976, en cuyo contexto se ubica Running (Stern, 1979), donde Michael Douglas interpretó a un veterano corredor cargado de problemas. Un desconocido Michael Mann dirigió un telefilm titulado La milla de Jericó (1979), sobre un condenado a cadena perpetua que encuentra en el acto de correr una escapatoria y una oportunidad para participar en una olimpiada.
El atleta indoamericano quedó capturado en Jim Thorpe. All American (1952), de Michael Curtiz con la interpretación de Burt Lancaster, en la que se planteó el ascenso y caída de este mítico atleta que terminó solo y en la ruina. Las imparables velocistas Wilma Rudolph y Gail Devers, y Roger Bannister, primero en recorrer una milla en menos de cuatro minutos, merecieron: Wilma (Greenspan, 1977), Corre por el sueño (Barnette, 1996) y La milla en cuatro minutos (Goddard, 1988).
En Doble triunfo (Forbes, 1978), secuela de Fuego de juventud (Brown, 1944), una huérfana aspira a participar en las pruebas de equitación de los juegos, mientras que Personal Best (Towne, 1982), transcurre entre amoríos y entrenamientos para los Juegos de 1980, para los que un doctor neo-nazi experimenta con su hija en La chica de oro (Sargent, 1979) y así convertirla en súper atleta. Yuri Ozerov fue el responsable de ¡Salve deporte, tú eres la paz! (1980) sobre el certamen desarrollado en Moscú con todo y boicot estadounidense y guerra fría en pleno, que ahora se puede contrastar con 16 días de gloria (1984), dirigido por Bud Greenspan y en el que se capturan las acciones de los juegos en Los Ángeles en 1984. Olimpiada 40 (Kotkowski, 1980), en tanto, revisa los juegos realizados en la clandestinidad en un campo en Polonia durante la II Guerra Mundial.
Seúl 88: los juegos de la XXIV Olimpiada (Kwang-Soo, 1988) constató aquellos juegos, revisados en Hand in Hand (Kwon.taek, 1989); Carlos Saura dirigió Maratón (1993), un recorrido de los juegos de Barcelona 1992 con la carrera como centro de atención, revisada en La batalla de maratón (Tourner, 1959), cinta para rastrear sus orígenes, y que también sirve como temática principal al documental El espíritu del maratón (Dunham, 2007). Greenspan volvió encargarse de la película para los juegos de 1996, Atlanta: Gloria olímpica (1997) y encarrerado, dirigió Sydney 2000: Olympics (2000), en compañía de Thayer e Squicciarini, y se siguió con Athens 2004: Stories from Olympic Glory (2004).
Perfect Body (Barr, 1997) exploró la tentación del uso de sustancias ilegales para tener el peso adecuado. Zhang Yimou se encargó de la ceremonia en Beijing 2008 Olympics Games Opening Ceremony (2008), recuperados también en Everlasting Flame (Jun Gu, 2019), centrado en las acciones, mientras que Faster, Higher (Susan Pui San Lock, 2008), videoinstalación experimental, explora temáticas culturales y políticas sobre China y los juegos. Carolina Rowland dirigió The Official Film of the London 2012 Olympic Games (2012).
En clave de comedia se filmó Astérix en los juegos olímpicos (Forestier y Langmann, 2008), en tanto Angelina Jolie presentó la vida Louis Zamperini en Inquebrantable (2014), interpretado por Jack O’Connell, corredor y combatiente en la II Guerra Mundial; por su parte, Bennet Miller entregó Foxcatcher (2014), un gran retrato del equipo de lucha que intentaba formar el siniestro John Du Pont, reclutando a dos medallistas olímpicos: notables actuaciones y oscura puesta en escena. La historia de Jesse Owens (Irving, 1984) y El triunfo del espíritu (Hopkins, 2016), retomaron la fascinante vida de aquel atleta que mostró, por si hiciera falta, el absurdo de la superioridad aria, y George Clooney realizó The Boys in the Boat (2023), de cómo se formó el equipo de remo de la Universidad de Washington para competir en los olímpicos de Berlín.
Días de tregua (2016), fue el filme del magno evento en Río de Janeiro 2016 que corrió a cargo de Breno Silveira, liderando a un amplio equipo fílmico, contexto en el que se presenta Las nadadoras (Sally El Hossaini, 2022) sigue a dos jóvenes que huyen de Siria para pedir refugio en Grecia de ahí participar en esta olimpiada: en el trayecto. Official Film of the Tokyo 2020 Olympic Games (2020) fue dirigida con la sensibilidad acostumbrada por Naomi Kawase, justo en tiempos de pandemia. El tema del abuso se vio reflejado en La caída (2022), filme realizado por Lucía Puenzo en el ámbito de los clavados del equipo femenil de México, en el documental At the Heart of Gold (Erin Lee Carr, 2019) y en la serie Simone Biles vuelve a volar (2024), ambas alrededor del equipo estadounidense de gimnasia.