Hoy quiero escribir sobre dos personas que admiro y respeto, su lucha ha sido por causas en las que coincido y su recorrido por defender la democracia respalda sus responsabilidades como funcionarios públicos, además de contar con la preparación académica necesaria para aportar en cada espacio de trabajo en los que se han desarrollado.
Me refiero a Mara Robles y Enrique Velázquez, que fueron parte de la primera generación que formó el proyecto que hoy es Hagamos. Sus aportaciones fueron valiosas al buscar el modelo de alternativa que las y los jaliscienses necesitaban para encontrar la opción que representara sus intereses.
Coincidir en este camino con sus aprendizajes legislativos y de la administración pública arrojó luces al momento de perfilar el partido donde la desigualdad y la libertad estarían al centro de los temas importantes de nuestro partido y por tanto de nuestro trabajo.
Con Mara y Enrique iniciamos nuestra vida política en el Congreso del Estado, algo que ha sido cuesta arriba, porque así es el camino de la oposición responsable, donde se entiende al Congreso como un contrapeso del poder ejecutivo al que fiscaliza y audita. Donde los intereses de todas las personas del estado sean respetados y representados.
Nuestro Grupo Parlamentario se caracteriza por el uso de argumentos, el análisis de los documentos técnicos y la sensibilidad de las necesidades presentes y futuras en la toma de decisiones para no confundir la urgencia con la necesidad.
Mara como la coordinadora de nuestro Grupo Parlamentario, es nuestra voz en la Junta de Coordinación Política; además, su propuesta de remunerar el trabajo doméstico y la búsqueda de la profesionalización del servidor público con un servicio profesional de carrera, que hoy tiene más vigencia con los nombramientos del Instituto de Transparencia, Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de Jalisco (ITEI) y la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) donde cuates y cuotas vuelven a recorrer los pasillos del Congreso.
Jalisco tiene muchas deudas con su gente y Enrique fue de los primeros en luchar por ellas desde el Congreso con agendas como: el matrimonio igualitario, la despenalización y otros usos de la marihuana y la donación de órganos que lo retratan como un hombre de izquierda.
Esto es Hagamos, esto es Mara y Enrique en el Congreso y seguirán siendo la oposición responsable, crítica y sensible que representa nuestros valores y nuestras luchas. Su experiencia les permite construir desde el legislativo la democracia que nuestro estado pide.
Con argumentos nos opusimos al endeudamiento simulado, nos opusimos al reparto de cuates y cuotas, pedimos transparencias en las deudas del gobernador. No nos vamos a callar, porque Jalisco necesita más legisladores como Mara y Enrique para el bien de su gente.
Ernesto Gutiérrez
