Que los legisladores de Morena, Verde y PT sostendrán un encuentro previo antes de la cita respectiva en la Comisión Permanente para analizar el escenario que depara la relación México-Estados Unidos en las próximas semanas, lo que incluye la posibilidad de reunirse con el canciller Juan Ramón de la Fuente para ver qué puede hacer el Poder Legislativo ante al endurecimiento de la política migratoria de los vecinos del norte, sobre todo en los temas de deportaciones y aranceles. Por lo pronto, celebraron la posición firme que ha asumido la presidenta Claudia Sheinbaum en ese tema.
Que en oficinas federales cuentan que la carrera por la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación tendrá solo dos protagonistas: las ministras Lenia Batres Guadarrama y Yasmín Esquivel Mossa. Por ahora, ambas siguen en sus labores proselitistas y ninguna quiere ceder un ápice en su aspiración de dirigir la nueva etapa del máximo tribunal a partir septiembre, al grado de que en las tarjetas informativas que manejan una y otra hay indirectas sobre supuestos votos a favor y críticas severas sobre este o aquel asunto. Saldrán chispas de ese proceso.
Que la bancada del PT en la Cámara de Diputados, encabezada por Reginaldo Sandoval, se alista para retomar este año su exigencia de cancelar los pagos al IPAB-Fobaproa, pese a la negativa expresa de la Secretaría de Hacienda, que encabeza Rogelio Ramírez de la O, y de Morena a desconocer la deuda generada por el rescate bancario de 1994-1995. Al menos en ese tema, los legisladores petistas estarán más cerca de sus “archienemigos” de PAN y PRI que de sus aliados de la llamada 4T.
Que en el Instituto Electoral de la Ciudad de México andaban con tanto trabajo atrasado que hasta apenas este fin de semana publicaron las estadísticas electorales de la jornada del 2 de junio pasado en la que Clara Brugada resultó ganadora de la Jefatura de Gobierno y se eligieron diputados locales y alcaldes. Nada más se tardaron unos siete meses.
