Que en medio de la euforia por los nombramientos del nuevo gabinete presidencial, el titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval, apostó por la institucionalidad y llamó a la treintena de generales de División con posibilidades de sustituirlo a evitar las estrategias políticas y de cabildeo con el equipo de Claudia Sheinbaum, así como a esperar a que sea la futura presidenta quien tome la decisión sobre quién la acompañará en su gobierno.
Que en la reunión con legisladores electos de la cuarta transformación ya se vio para dónde van las coordinaciones en ambas cámaras y todo apunta a que la del Senado sea para Adán Augusto López y la de San Lázaro para Ricardo Monreal, ambos participantes en la encuesta de las corcholatas; entre tanto movimiento, otra señal para los de Morena es que se sigue notando en el aplausómetro el respaldo para que Citlalli Hernández sea la próxima presidenta de ese partido a la salida de Mario Delgado.
Que la cúpula de Movimiento Ciudadano se reunirá este sábado para definir “el sentido y la ruta” de lo que sigue para el partido naranja, después de los resultados que obtuvo la institución política durante las elecciones del 2 de junio. El Consejo Nacional llevará a cabo su vigesimoséptima sesión en un hotel de la avenida Reforma en Ciudad de México, donde se tiene previsto un mensaje del coordinador Dante Delgado, quien no ha dejado de presumir la votación que lograron, en medio de las críticas de Enrique Alfaro y las alertas de Luis Donaldo Colosio.
Que en la UNAM ven la mano de José Narro Robles en el episodio que protagonizó el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la máxima casa de estudios al emitir un análisis altamente crítico a la reforma judicial. Dicen, entre otras cosas, que de manera extraña Mónica González Contró, titular del centro de estudios, no avisó al rector Leonardo Lomelí que iban a emitir un reporte que pondría a la comunidad puma otra vez en la mira del Presidente, por lo que los costos totales del madruguete aún están por verse.
