Que aún no son las elecciones en Durango y el primer caído en batalla es Manuel Espino, es un duro golpe para el ex integrante de gabinete, ya que después del trabajo realizado con su movimiento Ruta 5, en donde presume más de 20000 nuevos afiliados a Morena incluido él mismo y su renuncia definitiva a su cargo federal para cumplir con los tiempos que manda la ley, Morena le cerró la puerta y lo dejó fuera de toda participación.
Espino había acusado ya posibles malos manejos y dados cargados en el proceso de selección de finalistas y aunque en un principio se puso a las órdenes de Morena para lo que el partido lo requiriera, había declarado en medios que de quedar fuera y observar un amañado proceso cuestionaría seriamente su apoyo al partido, más si éste decidía poner a alguien de dudosa reputación y solo lo había usado a él para generar presencia. Sólo el tiempo dirá lo que Don Manuel y su despreciada Ruta Cinco harán.
Que a quien le ganó la emoción fue a Román Alberto Cepeda, ya que en una ceremonia privada para la inauguración de una empresa de transporte, se adelantó y sin esperar a nadie cortó el listón. Lo malo es que tan impaciente andaba que olvidó que correspondía a Jorge Zermeño y al gobernador Miguel Riquelme participar en la ceremonia. A menos que los propietarios le concedieran a Román la distinción.
Que hoy le toca comparecer al Fiscal Gerardo Márquez ante el Congreso del Estado, de Coahuila y si bien podría presumir temas en cuanto a la disminución de ciertos delitos de alto impacto, no puede decir lo mismo de su Fiscalía de desaparecidos y donde su subalterno José Ángel Herrera no ha dado resultados, además de que algunos colectivos de búsqueda ya han pedido en repetidas ocasiones su salida. No todo es miel sobre hojuelas.
Que quienes respaldan al morenista Rosendo Salgado son los laguneros Pedro Amador, de Lerdo, Pablo César Aguilar, de Gómez Palacio y Alejandro Jurado, diputado plurinominal.
Todos ellos formaron un bloque al interior de la secta morenista y respaldando a Don Rosendo para ser ungidos en la carrera hacia las presidencias municipales de la Región Lagunera.
Se dice además que Don Rosendo tiene nexos fuertes con algunas cúpulas estatales y que su misión es desestabilizar el proceso interno morenista. Algo es seguro, con la aparición de estos personajes se avizoran impugnaciones si los resultados no les favorecen, ya veremos si Morena supera esta prueba.
