Que como ya no hallaban qué hacer con Lauro Villarreal como jefe de la Oficina del Ejecutivo, lo enviaron de vuelta a Torreón a coordinar la campaña del candidato a presidente municipal, Román Alberto Cepeda González.
Lauro Villarreal tiene amplia experiencia en el servicio público y su historial político partidista registra hasta haber perdido la Alcaldía de Frontera. Ha sido recaudador de Rentas y contralor en el gobierno municipal que encabezó Eduardo Olmos, a quien se atribuye el nuevo encargo conferido al controversial político. El más sorprendido es el propio Román Alberto, quien habría expresado: “¿Y a mí por qué?”
Que la meta para la aplicación de la vacuna COVID-19 hacia el sector educativo quizás se logre para el sábado, luego de que, a 48 horas de iniciado el proceso, el 45 por ciento de las y los maestros en la entidad, así como personas que laboran en el mismo sector se había inoculado, por lo que el estado de Coahuila a continuación, analizará otros segmentos de la población de primer frente entre los que se ubican las y los policías de las diversas corporaciones, no sólo del estado, también de los 38 municipios.
Que las encuestas de Morena en el estado de Coahuila, han destacado por estar a favor de esa misma corriente política, sin embargo en la última semana la sociedad se ha visto involucrada en una guerra de sondeos por parte de los aspirantes para llamar la atención y con ello el voto.
Que pese a que nada está escrito, el líder del Partido Revolucionario Institucional de Coahuila (PRI), Rodrigo Fuentes Avila, se aventuró a declarar que se tendrá carro completo, pues confía en la estructura de sus simpatizantes, pero el lagunero se ha aislado en su región de Jimulco sin pensar en que el estado es más grande que ese sitio apartado de la región.
Que por más que el dirigente del Partido Acción Nacional (PAN) en Coahuila, Jesús de León Tello afirme que las salidas de ex militantes no afectarán el proceso electoral lo cierto es que hay mucha inconformidad al interior del blanquiazul por la selección de candidaturas. Una de ellas es la de Teresa Romo en Saltillo y cuya campaña no tiene pies ni cabeza, siendo lo más seguro que lleve al panismo al vergonzoso tercer lugar en esta ocasión.
