Que muchos priístas de la vieja escuela o seguidores de Rubén Moreira, asistieron al evento de Alejandro “Alito” Moreno y Carolina Viggiano a la ciudad de Saltillo, quienes estuvieron promocionando su candidatura a la dirigencia nacional del PRI. Sabían los priístas que tenían línea y deberían de apoyar a “Alito”, quien quiere ganar la carrera hacia la renovación del CEN del tricolor, por lo que se dejaron ver, ya que la esposa del exgobernador Rubén los tiene bien identificados.
Que el más contento era Lalo Olmos, ya que sabe que si ganan sus amigos Alejando y Carolina, tendrá muchas posibilidades de ascender, además, en próximas elecciones buscar una senaduría. Que el que tuvo que apechugar fue Rodrigo Fuentes, el líder estatal del PRI en Coahuila, ya que de los resultados que obtenga esta pareja, así estará su futuro no sólo en la dirigencia, sino en su futuro político, ya que su deseo es ser diputado federal o bien, brincar hasta una senaduría. La moneda está en el aire y tanto Olmos como Rigo, saben que es grande el compromiso con “Alito” y tienen que sacar el resultado en Coahuila.
Que todo se encuentra listo para que este miércoles Gómez Palacio se convierta en la capital de la política eclesiástica al arribar 25 obispos de diferentes puntos del país, así como el Arzobispo Primado de México, Carlos Aguiar Retes y el cardenal Norberto Rivera Carrera, quien vendrá a su natal Durango y tendrá oportunidad de saludar a algunos conocidos. Los prelados vendrán a la toma de posesión del tercer Obispo, Jorge Estrada Solórzano.
Que claridosa como es, la alcaldesa Leticia Herrera no se queda con nada y aseguran que en la visita de hace una semana del gobernador Aispuro, a quien acompañó en la entrega de obras de pavimentación en el Parque Industrial, al hablar por micrófono expresó su gusto por ver a caras conocidas, sobre todo de empresarios, aunque -precisó- “habrá algunos funcionarios que no les agrade mucho mi presencia”. Quienes vieron, dicen que el Recaudador de Rentas, Ismael Sánchez Galindo, ubicado en la tercera fila, se remolineaba en su silla y volteaba discreto hacia el techo del toldo.