Que como ya en Edomex, Morena postuló mujer como candidata al gobierno Estatal, aunque con la figura de coordinadora de los Comités de Defensa de la 4T para que pueda placearse sin tener que rendirle cuentas al INE, ahora en Coahuila le abre las puertas a la postulación de un candidato varón.
Que muy contento ha de estar el senador morenista Armando Guadiana Tijerina al ver como al estar encabezando varias encuestas, los astros se le alinean.
Que nada más habrá que esperar que su designación sea allá a finales de agosto, aunque el dirigente nacional Mario Delgado Carrillo, “curiosamente” en el caso de Coahuila, ha pospuesto ya dos veces la fecha.
Que por cierto, Guadiana fue entrevistado por Notivox para hablar del tema de las minas en la zona carbonífera, y refirió que son trampas mortales. Sin embargo, es poco lo que se ha hecho para revisar el tema legal. La tragedia sigue presente y la Secretaría del Trabajo federal, bien gracias.
Que la Cámara Minera de México (CAMIMEX) no reconoce a la empresa propietaria de la mina ubicada en el paraje La Agujita, en la comunidad Las Conchas, municipio de Sabinas, Coahuila y en la que quedaron atrapados 10 mineros, luego de su derrumbe y posterior inundación. La mina opera a 200 metros del río Sabinas y a pesar de que el IMSS reconoce que el patrón está registrado en esa institución y sus cuotas están al corriente, no se ha emitido información oficial que señale la propiedad de la concesión, tampoco de las inspecciones que la Secretaría del Trabajo a nivel federal ha desarrollado para verificar que se cumplan las medidas de seguridad.
Que los pocitos de carbón son excavaciones verticales de 20 hasta 100 metros de profundidad. Los cañones son reducidos, la ventilación es mala, no hay salida de emergencia y usualmente se labora con equipo de seguridad reducido o de plano, artesanalmente. Para la organización Pasta de Conchos era una tragedia anunciada, luego que los propietarios no realizaron trabajos de barrenación para medir la presencia de gas o cuerpos de agua próximos a las paredes del filón.
Reprochan que las autoridades federales no cumplieron con las medidas de inspección prometidas a esa organización en anteriores accidentes que han cobrado la vida de decenas de mineros. La defensora Cristina Auerbach señaló que hasta la fecha, esa mina junto con otras dos que aparentemente pertenecen a la misma empresa no contaba con paredes construidas, por lo que se convertían en trampas mortales. Dicen los pobladores que descender a esos pozos no es un tema de valentía, sino de resignación y necesidad, porque no hay más medios para llevar el pan a la mesa de sus familias.