Que cada vez se complican más las cosas para Carlos Peña, por lo que seguramente ya solo espera un milagro del fallo que habrá de emitir la Sala Superior del “Trife”. Mientras tanto, la presidenta de Morena Yuriria Iturbe y los diputados Armando Zertuche, Humberto Prieto, Magaly Deándar y Marcos Gallegos presionan para que se baje de la candidatura.
Que ayer fue cumpleaños de Magdalena Peraza Guerra, quien tuvo un festejo muy familiar al lado de sus hermanos Genoveva y Homero; lo interesante se dio en redes sociales, donde le llovieron felicitaciones pero hubo una en particular, de Mónica Villarreal Anaya, candidata morenista a la alcaldía de Tampico. Del PAN, nadie le dedicó unas palabras.
Que ahora se sabe que Óscar Luebbert fue de los pocos políticos que visitó a Eugenio Hernández Flores cuando estuvo en la cárcel. Dicen que en la prisión y en el hospital es donde se conoce a los verdaderos amigos, y de Óscar Almaraz probablemente no podrá decir lo mismo, porque este último se hizo cercano al Cabecismo que lo envió al reclusorio.
Que por cierto, a Amira Gómez Tueme se le vio feliz al reencontrarse con Geño en Reynosa y sumarse a una actividad de campaña, recordando viejos tiempos en el PRI. Ella fue su gran aliada al inicio de su gobierno, cuando le encomendó la presidencia de la Junta de Coordinación Política en el Congreso del estado, pues la independencia de poderes siempre ha sido una utopía.
Que en un recorrido por colonias de Ciudad Victoria, la candidata al Senado por el PAN-PRI Imelda Sanmiguel se metió a sectores donde Eugenio Hernández tiene arraigo; intentó convencerlos de cambiar las lonas del Verde por las suyas y no tuvo un resultado exitoso.
Que Melva Solís reclamó el cambio hecho por equidad de género para meter al coordinador municipal del Partido Verde, Luis Márquez, en la planilla de coalición con Morena y PT a la alcaldía de Altamira. También dejó entrever su molestia sobre Armando López para confabular la acción y dejarla fuera.
