Que cantaba estaba la postulación de Américo Villarreal Santiago como plurinominal por Morena y aumenta la presencia de Tamaulipas en el Senado, a la espera del resultado del 2 de junio. Literalmente el cupo se llenó por la 4T, con Olga Sosa y José Ramón Gómez Leal, así como Eugenio Hernández y Maki Ortiz por el Verde.
Que en la Cámara Alta, Paola López ya llegó a suplir a Gómez Leal, en una jornada de licencias y relevos. En San Lázaro se alistan tres de la zona sur, Héctor Marín por Erasmo González, Honoria Mar en lugar de Rosa González y Rosario González (secretaria general en funciones del Comité Estatal) por Mariela López, las últimas, de la fracción panista.
Que Ismael García Cabeza de Vaca no votó a favor de la aprobación de la moneda conmemorativa del bicentenario de Tamaulipas, tema presentado en el Pleno del Senado y apoyado con 70 votos de los legisladores; sin embargo, el panista se abstuvo de dar el suyo, lo que fue criticado por morenistas que piensan no quiere al estado.
Que nadie del gabinete se salvará de comparecer ante el Congreso del estado por la glosa del Segundo Informe de Américo Villarreal Anaya, algo inédito; pero la buena noticia para aquellos funcionarios sin caerle bien los reflectores es que no transmitirán esas sesiones debido a la veda electoral. Esto no le cae nada en gracia a la oposición.
Que a ver si los dirigentes de los partidos políticos no se les olvida que entre sus candidatos para las elecciones locales, ahora deben abrirle paso a representantes de minorías como personas con discapacidad, de la diversidad sexual, migrantes y, desde luego, jóvenes y adultos mayores, porque no hay señales de incluirlos, sobre todo a los primeros.
Que Carlos Fernández lanzó un dardo en redes sociales: “Quisiera ver a más compañeras y compañeros políticos que les mueva un cambio positivo en su entorno y no el hambre de poder y dinero”, escribió y dejó una posdata: “Hay unos que de plano no lo disimulan”. ¿Dirigido a rivales o compañeros azules?
