Que representa todo un misterio la circunstancia por la cual se le brindó protección a una candidata a juez de lo familiar en la región Toluca, que por cierto abarca varios municipios desde la capital hacia el norte de la entidad, una zona relativamente ajena al crimen organizado, así que probablemente no es por ahí el origen del caso.
Por obvias razones no se brindaron más datos, pero el Secretario de Seguridad señaló que la aspirante “se sintió amenazada”, y le pusieron guardias. No se especificó hubo una agresión, amenaza telefónica o algo similar. Sin embargo, desde el inicio del proceso se ofreció esa atención a quienes buscaran un cargo en estos novedosos comicios y es bueno que estén cumpliendo el ofrecimiento.
Que sin duda el caso Capulhuac está generando todo un escándalo, luego de los señalamientos contra la presidenta municipal, Selene “N”, por presunta agresión física, verbal y sexual contra una trabajadora del Sistema Municipal DIF el pasado viernes 2 de mayo. Estarían involucradas la alcaldesa, su hija y una oficial de policía. El tema tiene evidentemente potencial para escalar a más, pues remite a casos que en el pasado le han costado el cargo a los protagonistas.
Se recuerda el episodio en Toluca, donde al ahora ex alcalde se le señaló por secuestro exprés y en Santiago Tianguistenco, donde el entonces edil también terminó en prisión por la agresión a una empleada y la extorsión a otro. Claramente hay ocasiones en que la política desata aspectos personales muy negativos.
Que hablando de autoridades municipales en problemas, en la Feria de Temoaya del pasado domingo, una fiesta patronal en la comunidad del Llano de la Y, un hombre fue asesinado durante una riña con otra persona, que en medio de la discusión accionó un arma.
El problema empeora al considerar que la actual administración de Temoaya, que encabeza la alcaldesa Berenice Carrillo Macario, decidió proteger el evento ¡con solo una patrulla tripulada por una solitaria uniformada! La agente obviamente no estuvo en la capacidad de intervenir oportunamente y el agresor se dio a la fuga. Negligencia del ayuntamiento, a todas luces.
