Que el arranque de la nueva Legislatura, aunque no se concretó una mayoría para el género femenino, no deja de ser histórico porque es la primera en iniciar con un abierto perfil electoral que puede contaminar el diálogo y los consensos. Muchas piezas se mueven ya, buscando perfilar una campaña para la sucesión gubernamental. Quizá los acelerados deberían verse en el espejo de Sheinbaum y Ebrard, que cuando los destaparon cual corcholatas para la grande, comenzaron a recibir inclementes pisotones. Pues allá cada quién y sus cálculos.
Que en la cuestión de género, en efecto fue una lástima que no se lograra mayoría femenina, sin embargo el último en integrarse a la legislatura por decisión del Tribunal Electoral Federal, Guillermo Zamacona, tiene un amplia agenda para apoyar a las mujeres, entre otros temas que seguramente irá mostrando. Nadie debería ver su presencia con recelo, pues lo único que ocurrió es que se aplicó la ley, y eso debe ser lo primero que respeten quienes las elaboran: las y los diputados.
Por cierto, el que se voló la barda y se ganó simpatías en redes sociales aunque podrían cuestionarle el franco lenguaje, fue Pepe Couttolenc, el líder estatal del Partido Verde Ecologista; posteó una presentación de las flamantes diputadas de su partido: “las más chingonas”, afirmó.
Que cerrando el tema legislativo, el mandatario Alfredo Del Mazo volvió a hacer gala de buenas formas políticas y su mensaje fue por demás respetuoso y conciliador al acudir a la apertura de la nueva Cámara. Desde la máxima tribuna adelantó que el Paquete Fiscal 2022 será una propuesta responsable y pensada en los temas prioritarios más urgentes.
Que volviendo al tema de la sucesión, flaco favor le hizo el Senador Higinio Martínez a la Secretaria Delfina Gómez, multada por el INE por pasar la charola a empleados municipales de Texcoco (de confianza o no) para su campaña en 2017. Argumentó que no fueron retenciones, sino donativos voluntarios. Eso, a estas alturas, remite a cualquiera a las “aportaciones a la causa” que el propio régimen federal justifica cuando la billetiza sale a la luz. Lo dicho, el que madruga, tempranito se expone.