Que quien tardó ocho días en reaccionar después de la amonestación impuesta en el Congreso del estado es la diputada local de Morena, Sharon Macotela Cisneros, pues este jueves fijará su postura al respecto en una conferencia de prensa. La legisladora de Tula no tiene el respaldo de sus compañeros pues el mismo coordinador de su fracción parlamentaria, Jorge Hernández Araus no metió las manos para evitar la sanción y no ha querido declarar al respecto como si su compañera de bancada le causara un verdadero dolor de cabeza.
Que los ediles andan desatados con sus gastos para celebrar eventos sociales, según dicen, para beneficio del pueblo, y como ejemplo está el pasado Festival Agustino en Actopan, donde la presidenta municipal Tatiana Ángeles pagó una millonaria cifra para presentaciones culturales, al igual que en Tula de Allende, donde dicen que la presentación de la cantante Lila Downs fue todo un suceso, pero para las arcas locales. Pero no tienen la culpa ellos, sino los regidores que les aprueban todas sus ocurrencias.
Que en Hidalgo, al menos seis actores interpusieron una controversia constitucional contra el plan B de la reforma electoral del presidente López Obrador. Se trata ahora sí del Instituto Estatal Electoral, que por primera ocasión se manifiesta abiertamente en contra de los cambios aprobados en San Lázaro, así como cinco ayuntamientos: Tlanchinol, Huasca de Ocampo, Nicolás Flores, Tezontepec y Huejutla; falta que se pronuncien partidos de oposición en el estado, que todavía no fijan una agenda política para este 2023, pues siguen en proceso de restauración tras la derrota de la gubernatura.
Que el ex gobernador de Hidalgo, Miguel Osorio Chong se ha quedado solo con su soledad en el Senado y hasta parece que lo tendrán que cobijar sus paisanos morenistas María Merced González y Navor Rojas, luego de que le voltearon bandera desde la Cámara alta sus propios correligionarios para quitarle la coordinación de su grupo parlamentario en el PRI; falta que se pronuncie su aliada de toda la vida, Nuvia Mayorga y en una de esas Xóchitl Gálvez, quien hace una década era su archienemiga.
