Apenas habían pasado unas horas de 2020 cuando dos funcionarios de la Secretaría de Seguridad del estado, padre e hijo, fueron agredidos a balazos en la colonia Nueva España, del municipio de Guadalajara. Cuentan que ambos estaban disfrutando los festejos del fin de año cuando unos sujetos llegaron a dispararles. Hasta el cierre de esta edición se desconocía la gravedad de sus lesiones o si alguno de los dos había fallecido. Tal parece que la inseguridad y la violencia seguirán siendo el pan de nuestros días.
Ni los federales ni los estatales cumplieron. Ya se pasaron los meses y los días de 2019 y la Línea 3 del Tren Ligero aún tiene muchos arreglos pendientes. Las filtraciones de agua, los socavones y la falta de instalación de neoprenos, entre otras muchas más, hizo imposible que los funcionarios públicos cumplieran su palabra. El director del Siteur, por su parte, dice que apenas para abril puede ser que comience a funcionar esta obra. Asegura que no es falta de presupuesto. Lo cierto es que cada vez se vuelve más complicado creer en la palabra de cualquiera de los que ha prometido un fin a este proyecto que lleva casi cinco años… y contando.
El que tuvo buen tino fue el cardenal Francisco Robles Ortega quien, luego de su homilía , habló sobre la prioridad de pedir por las personas desaparecidas, así como por sus familiares. Lo mejor fue que propuso a todos los allegados y víctimas hacer una lista pública con nombres y datos de quienes están ausentes. ¿Será que esta medida puede ayudar más que las estrategias de la Fiscalía del estado?
En junio el futbolista Joao Maleck asesinó, por accidente, a una pareja de recién casados. Iba en su auto, a exceso de velocidad y alcoholizado. Hasta hoy está preso y pasará cuatro meses más, al menos, tras las rejas. Esto además de la herida irreparable por haber quitado la vida a dos personas. Parece que para muchos no ha servido de escarmiento el caso, pues durante las festividades de fin de año 48 pruebas del alcoholímetro resultaron positivas en el AMG, de los cuales 17 fueron sancionados por superar el límite. Quizá sería más sencillo beber y pedir un uber ¿o no?