Que hoy no es un día cualquiera. Mientras, la FGR revelará esta mañana que el Rancho Izaguirre no fue un “campo de exterminio” sino de “adiestramiento”, la fecha marca un antes y un después. Hace 7 años, tres estudiantes de cine desaparecieron en la Universidad de Medios Audiovisuales, un crimen que sacudió las conciencias de Jalisco y que hoy, irónicamente, se topa con un informe que podría diluir la justicia en tecnicismos. Aquel 19 de marzo fue el primer grito de horror en un estado que, desde entonces, se hundió en el top nacional de desapariciones. La Glorieta de los Niños Héroes, testigo mudo de décadas de historia, a partir de entonces fue renombrada como Glorieta de los Desaparecidos: encarna el luto colectivo. Su pedestal, diseñado en los 50 para honrar hazañas bélicas, es ahora un monumento vivo donde se graba el nombre de quienes fueron arrancados de sus familias. No es coincidencia: esta fecha se teje con hilos de dolor.
Que solo un grupo muy reducido de emecistas sabe bien a bien el tono del round en que lemusistas y alfaristas intercambiaron palabras y al menos en lo público bajaron la guardia tras la reunión de Movimiento Ciudadano encabezada por el gobernador Pablo Lemus y en donde además estuvieron entre otros: Juan José Frangie, Mirza Flores, Salvador Zamora, José Luis Tostado, Clemente Castañeda y Enrique Ibarra. Ya veremos si de cara a la disputa por la coordinación estatal realmente se procesaron los diferendos y acordaron caminar rumbo a la elección del 27 de abril y si se mantendrá esa posición Mirza Flores. Por lo pronto se acordó que Zapopan va para Naraly del equipo de Juan José Frangie y Guadalajara para Fabi del equipo de Lemus y Priscila Franco.
Que todavía antes de la encerrona entre integrantes de Movimiento Ciudadano, Juan José Frangie sostenía su reclamo a Mirza Flores de supuestamente adueñarse del partido, con firmeza, se proclamó socio de MC desde 2016, pero, desde el viernes, un emecista solicitó al INE un comprobante oficial de afiliación. El resultado fue que el nombre de Frangie brillaba por su ausencia en el registro vigente de militantes. El episodio dejó al descubierto no solo grietas, sino sombras en las credenciales de quienes exigen lealtad.
