Que donde no ven aún muy claro es en el sector de la construcción pues nos llega información que los recursos destinados a la obra pública siguen sin llegar por lo que las empresas se mantienen a la espera de la tan deseada reactivación, el tema es que mientras no se libere en su totalidad del presupuesto, no hay mucho qué hacer.
Por ejemplo, el avance en el Presupuesto de Egresos de la Federación es nulo técnicamente según se reporta el Observatorio de la Industria de los 336 mil millones de pesos estimados para este año apenas se ha ejercido un 7 por ciento.
Que en el caso de los megaproyectos como el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas o el aeropuerto de Santa Lucía ya se tiene un avance de 41 por ciento de lo ejercido, pues de los más de 91 mil millones de pesos se han gastado ya alrededor de 41 mil millones.
Habrá que esperar a ver cómo van las cosas en el estado donde uno de los objetivos del gobierno de Diego Sinhue es apostar por la infraestructura utilizando el crédito recién contratado del cual la mayoría se fue a obras de carácter social a los municipios.
Que ante el ritmo acelerado que ha tomado la pandemia, contagios y muertes provocadas por el coronavirus no se descarta que así como lo han hecho especialmente los municipios de León e Irapuato las medidas para evitar el contacto físico y con ello la propagación de la enfermedad se endurezcan en todo el estado.
Y es que si bien es cierto es importante que la economía no muera, lo es más aún preservar la vida de las personas por lo que no es de descartarse que empiece a haber en el estado una mezcla de confinamiento con actividad especialmente los fines de semana que es cuando se supone no debería de haberla y es cuando se dan la mayoría de los contagios.
