Reflexión pascual: Adelantados y desatados…
Hacer política y promocionarse con recursos públicos es poco ético.
Cuando un político ostenta un cargo (sobre todo de representación), debe centrar su tarea en responder a las obligaciones que le otorga o confieren el cargo y no, a promocionarse y buscar otros cargos o encargos aprovechándose de los recursos y bienes públicos.
En todo México muchos políticos andan adelantados y desatados por las próximas elecciones.
El 2027 de forma alucinada a muchos los puso locos.
Están en juego 16 gubernaturas. Esa precocidad con notas de ansiedad debe ser tratada. Así lo ha sugerido la presidenta Claudia Sheinbaum.
Se desconoce si la epístola “deontológica” ya ha llegado a manos de Morena que encabeza Luisa María Alcalde y Andrés Manuel López Beltrán, presidenta y secretario de organización del partido guinda. Enrique Dussel con la nueva cartilla moral se estará revolcando en el otro barrio…
Ojalá la carta de recomendación de la presidenta Sheinbaum (si es que ya se envió), no haya sido interceptada por algún priista porque para ellos la moral: “es un árbol que da moras y vale para pura chingada”, en palabras del priista y cacique Gonzalo N. Santos ex gobernador de San Luis Potosí.
La hipocresía y el doble discurso no deben ir con el movimiento encabezado por el ex presidente Andrés Manuel López Obrador.
Si quieren adelantarse pues que se adelanten, pero no con recursos y/o ocupando puestos o cargos de elección popular.
¿Acaso nos tomaran por imbéciles? Los burros andan sueltos y sin mecate.
Los más osados y listillos dirán que es un problema dialéctico pues con el viejo régimen no se movían para salir en la foto.
Ahora es moverse para estar en la jugada pues el viejo régimen junto con Fidel Velázquez está enterrado.
Son cínicos e indolentes y más los que traen genes priistas.
La herencia los traiciona. Apestan.
El poder los vuelve locos y los obnubila. Hace bien la Ejecutiva Federal en preocuparse por los adelantados y adelantadas pues en el fondo lo que subyace a esos movimientos y campañas anticipadas es la búsqueda del poder por el poder aunque algunos políticos (sin excluir sexo, orientación, creencias, etc), con artimañas disfrazan su apetencia de poder utilizando casas de representación o gestoría, campañas de salud y costosas campañas en redes sociales para promocionar su figura y egocéntrica personalidad política construida gracias al movimiento que les ha favorecido en elecciones pasadas.
Y luego vienen algunos políticos con una soberbia y petulancia a exigir nuevos espacios y candidaturas disque respaldados por sus votos.
Cuando sus votos se deben al movimiento y al arrastre de la transformación.
Desconocen que en las elecciones federales para presidenta y/o presidente de la república la participación aumenta. Las únicas olas que conocen sin estudiar son las del mar. ¿Así o más desorientados?
Los distintos momentos de la vida política de los seres humanos son una serie de experiencias conectadas entre sí, que deben obedecer al movimiento natural, orgánico y genuino de su arena de participación.
Los tiempos en política deben estar regulados, de lo contrario nos encontraremos ante deformaciones y monstruosidades políticas. Eso que la medicina llama problemas “teratológicos”.
Adelantar y desatar nuevas y/o futuras experiencias en la esfera política es contravenir principios y valores que al menos en MORENA, deben respetarse pues la búsqueda del poder por el poder no es un principio vertebral que mueva a los militantes y simpatizantes del partido en el gobierno.
Estoy convencido que nadie nace a destiempo, nos dice el libro del Eclesiastés.
¿Por qué tan adelantados y desatados? Mi reflexión pascual en este caluroso domingo de resurrección desde la Comarca Lagunera…
@CUAUHTECARMONA
