Los opositores al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y a la cuarta transformación le están haciendo lo que el viento a Juárez: Nada.
Esta frase tan empleada por muchos mexicanos tiene muchas historias que vale la pena saber.
Francisco Masse en una excelente columna titulada ¿Qué fue exactamente lo que le hizo el viento a Juárez? (Milenio), escribe:
“En su libro 'Un indio zapoteco llamado Benito Juárez', Fernando Benítez recoge una leyenda —de esas que abundan en los libros de historia de México— que dice que, cuando era niño, don Benito solía ir a cazar animales pequeños acompañado por otros niños; pero en una ocasión se embarcaron en una pequeña canoa y fueron sorprendidos por un ventarrón:
los niños, asustados, abandonaron la embarcación y nadaron a la orilla, sólo Benito se quedó en ella y aguantó hasta que terminó el ventarrón.
Según Benítez, en los siguientes días nació la frase en el pueblo de Guelatao”.
De muchas historias esta es la más creíble y romántica pues nuestro indígena más ilustre que ha dado la patria, la tuvo difícil desde siempre contra los imperialistas que hoy serían los neoliberales.
Así entonces podemos citar la frase cuando el viento no apaga las velas o, no logra que fracasemos ante proyectos y objetivos claros.
El proyecto del presidente López Obrador está prosperando contra viento y marea donde los canónigos del viejo régimen y de la transa y corrupción se resisten a dejar el poder a pesar de que el pueblo los rechaza e impugna.
Esta reflexión (frase), a propósito del desgaste opositor infructuoso que busca truncar las reformas y el ritmo que la cuarta transformación le está imprimiendo a la nueva vida política del país.
Los adoradores del pasado, esos que en copas viejas sirven vino nuevo se retuercen ante el cambio paradigmático polarizador que vivimos. A los “políticamente correctos” les parece que todo es necedad como la revocación de mandato.
Ahora resulta que los opositores han presentado ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación una acción de inconstitucionalidad contra la Ley de Revocación de Mandato cuando en la Cámara Alta fue aprobada por todas las fuerzas políticas.
En Marzo del próximo año los ciudadanos tendremos el pleno derecho de manifestar apoyo o no al Presidente de la República quien sin duda la oposición le está haciendo lo que el viento a Juárez.
El Presidente se sabe con el apoyo popular y ciudadano. Es inmune ante los corruptos y oportunistas que traficaron y negociaron con maletas cargadas de dinero.
Estoy convencido que esa acción de inconstitucionalidad presentada hace unos días es una vacilada que la oposición ejerce para desquitar el sueldo.
El hartazgo del ciudadano que llevó a MORENA al poder tiene que tomar cauce institucional y construir la plataforma política que le de permanencia y continuidad a los proyectos del Presidente con rumbo al 2024.
Es una tarea aún pendiente que no se debe descuidar.
Sin simulaciones y chantajes el titular del Ejecutivo debe estar firme ante sus opositores, de lo contrario el viento puede despeinar al Presidente.
@cuauhtecarmona