Tamaulipas gritó en las urnas que la opción que eligió para echar al PRI hace cinco años ya no le parecía confiable. La ciudadanía le dio una bofetada con guante blanco a Acción Nacional, porque no cumplió sus expectativas y reprueba su manejo en el poder.
Esa aplastante mayoría que en 2016 apostó por el albiazul, esta vez le dio la espalda y llevó al triunfo a su antítesis, cambiando de golpe el mapa político del estado.
Morena se alista para gobernar a casi ocho de cada 10 tamaulipecos, luego de conquistar los municipios más grandes del estado, excepto Tampico que se cuece aparte.
Ya el Instituto Electoral de Tamaulipas definirá cuántos ayuntamientos logra recuperar el PAN tras el cómputo final, aunque no se espera que modifique mucho el saldo del domingo.
Pero lo más devastador, sin duda, para el panismo, es que se les fue de las manos el control del Congreso del estado. Esto esboza un voto de castigo tremendo contra los actuales diputados locales.
¿Qué sucedió?, ¿acaso negar el desafuero del gobernador?, ¿no haberse acercado a sus representados?, ¿su tirria contra López Obrador?, ¿no ser más humildes y menos excluyentes?
Son muchos los factores que pueden haber influido, pero también solo uno; valdrá la pena que hagan un ejercicio de autoreflexión y dejen de elaborar ese manual de cómo ganarse la animadversión de los electores.
Las masas prefirieron votar a ciegas por candidatos desconocidos que buscaban llegar al Congreso del estado, bajo las siglas de Morena, que por los bien conocidos productos azules.
Largas carreras políticas se quedaron en el camino, noqueados, para dar paso a nuevos perfiles, muchos de ellos sin experiencia que los respalde para sus nuevas tareas; pero para las mayorías que se expresaron el 6 de junio, eso fue mejor que votar por el PAN.
El destinatario de ese voto de confianza habrá sido AMLO, dicen analistas.
El retroceso del PAN es muy grave para ese partido cuando dentro de poco el árbitro electoral arranca los preparativos para la elección de gobernador. Y porque el bloque entre el Ejecutivo y el Legislativo ya será cosa del pasado. _