Chile amanece lleno de esperanza. Su Presidente electo, el joven liberal de izquierda –no es redundancia- Gabriel Boric Font (35 años, Licenciado en Derecho) anunció ayer su gabinete de lo que resaltan tres cualidades importantes.
La primera es el tipo de gobierno socialista -¡uy, qué miedo!- que pretende encabezar. Se creía que Boric podría irse por la línea del –fracasado- comunismo latinoamericano, pero por los perfiles que seleccionó optó por una línea socialdemócrata moderna y pragmática.
Segunda cualidad: la importancia que le da Boric a las cuestiones de género con no solo una fuerte presencia de mujeres –casi el 60 por ciento- sino también porque son perfiles comprometidos con los derechos de éstas y de sectores desfavorecidos.
El tercer punto es que en materia económica Boric se fue por la “vieja confiable” y no va a experimentar: nombró en Hacienda a Mario Marcel, un prestigiado economista con experiencia nacional e internacional y quien contrasta un poco con el resto de gabinete porque cuenta con 62 años de edad –el resto del equipo es 20 o 25 años más joven- pero también porque ha jugado un papel relevante en la estabilidad financiera de Chile en los últimos lustros. Un viejo pero confiable lobo de la política económica continental.
Pareciera que Boric sí toca piso, reconoce sus propias limitaciones y por ello buscó perfiles brillantes y especializados para la mayoría de los cargos lo que habla que no espera ser el hombre orquesta que intenta tocar todo, sino el director de orquesta que coordina talentos individuales.
Mientras el Chile “socialista” da muestras de apostar por una prometedora visión del futuro, en nuestro México el régimen “liberal –ajá-” sigue manejando a través del retrovisor y en esa misma dirección.
El modelo unipersonal sazonado con resentimiento, corrupción e ignorancia nos ha llevado a ver que el interlocutor del momento sea “Al Chipotle”, del INE, un furibundo monigote creado para contestar los embates… al mismo nivel. Pobre México, tan cerca de la 4T y tan lejos de Chile.
PD. En Chile ya van por el cuarto refuerzo contra covid-19, aquí no hemos vacunado a niños. ¡Plop! haría el chilenísimo Condorito.
Celso Mariño
