Política

La política agroalimentaria en México I

  • De la utopía a la realidad
  • La política agroalimentaria en México I
  • Rafael Palacios

Este momento de transición y rompimiento de paradigmas invita a pensar en una paradoja: con más de 5 mil programas sociales dirigidos a eliminar los rezagos sociales y una asignación exorbitante de presupuesto, la concentración de ingreso en México se ha acentuado y los escenarios de pobreza resultan acuciantes. 

 
Durante más de 30 años, el diseño de la política social se dedicó a apagar los fuegos generados cuando los gobiernos prianistas renunciaron a controlar sus principales variables macroeconómicas: una constante en estas tres décadas fue fijar el salario real por debajo del costo promedio de la canasta básica. En este tránsito de fracasos neoliberales la política pública se deslindó de la obligación de vincular la economía nacional respecto a sus sectores sociales y productivos, y específicamente dejó relegada la necesaria, proverbial y siempre estratégica producción nacional de alimentos. En detrimento del fomento agropecuario y de la regulación agroalimentaria nacional se fortalecieron unilateralmente las estrategias transnacionales al grado de que actualmente son 10 empresas las que controlan la industria alimentaria del país lo que generó que estemos importando el 48 por ciento de los alimentos que se consumen internamente y en junio de este año las importaciones de maíz -que para los mexicanos es el alimento fundamental y siendo México “centro de origen de este grano”-, representaron poco más del 45 por ciento de los 13 millones 558 mil toneladas de todos los granos básicos y oleaginosas que se adquirieron en el extranjero para el abasto nacional. La dependencia alimentaria nacional lleva el ritmo de la rectoría del mercado en actividades de acopio, regulación de precios, la estructura de créditos y subsidios así como las inversiones e investigación, innovación, infraestructura y tecnología, que sintetizan el hecho de que los campesinos mexicanos dejaron de ser vistos como actores estratégicos y fueron excluidos a las filas de la pobreza. 

 
Esta desarticulación de la economía nacional se expresa en que los niveles de pobreza por ingreso en el medio rural se han mantenido prácticamente iguales a los existentes hace unos veinte años, aquejando a 6.1 millones de hogares en localidades de hasta 15 mil habitantes cuyos efectos son: ínfima calidad de vida, migración, desintegración de los núcleos familiares que además son unidades productivas, desnutrición infantil, entre otros lastres sociales. 



@RafaPalacios83

Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.