A reserva a de consultar a los expertos, que aquí están pero los han hecho a una lado por cuestiones políticas, hoy le comento que la carencia de agua para la zona centro del país, de la que tanto se quejan y pintan como catástrofe, tiene solución. Pero como se sienten muy “sacalepunta” los nuevos funcionarios venidos con Morena, de la Conagua y de la CAEM, le comento lo siguiente: El sistema de agua del Cutzamala, que quita la sed al Valle de México, y esto incluye a la capital del país, lo diseñaron en varias etapas, de acuerdo a como fuera creciendo la demanda.
Tal vez alguien, o “álguienes” se retuerzan en su escritorio cuando lean esto, pero ya estaba planeado que una vez que el agua transportada al Valle de México a través del Sistema Cutzamala hubiese llegado a su límite, lo que seguía era el agua del Amacuzac, lo cual no entienden los actuales altos burócratas –que no son ni técnicos ni políticos, pero tienen puestos de jefes. Les recomiendo al experto, el arquitecto Benjamín Fournier, ex Secretario del Agua quien ha defendido con elementos de razón el abasto de agua del Estado de México.
El Amacuzac ya estaba contemplado como la siguiente etapa del sistema Cutzamala para dotar de agua al Valle de México, en un plan diseñado por el profesor Carlos Hank González y una medida de apoyo es tomar en cuenta la migración que recibe el Estado de México, que ya hace un par de décadas se calculaba en 365 mil habitantes anuales, o sea, el equivalente a una ciudad de tamaño medio.
Ay, cómo se le extraña… de mantener la organización del ESTADO MAYOR PRESIDENCIAL, así con mayúsculas, ya habría resuelto la recuperación y el rescate del Puerto de Acapulco, y sin temor a exagerar, no habría gente con hambre, con sed, con falta de medicamentos, y la iniciativa privada ya estaría al cien en la adecuación y en la reconstrucción de toda la zona turística.
