Aún se encuentran dialogando los actores políticos de Hidalgo, tanto de los poderes Legislativo y Ejecutivo, así como los partidos políticos, sobre las reformas electorales que aplicarían para el próximo proceso electoral.
Como ya he comentado hay más de 20 propuestas de reforma, pero la que se lleva los reflectores es la que busca reducir los órganos desconcentrados del IEEH, recordando que en cada proceso, se instalan de manera temporal, consejos electorales distritales y municipales, y la propuesta de reforma busca suprimir los consejos municipales.
Dicha iniciativa contempla reducciones al gasto y la operatividad, ya que el suprimir los consejos municipales electorales durante cinco meses, implicaría no contar con 252 consejerías electorales municipales, así como de 420 personas de la estructura técnico-administrativa, además de no necesitar el arrendamiento de 84 inmuebles y el respectivo equipamiento tanto de los consejos como de las bodegas electorales, pago de servicios, vehículos, insumos y otros gastos diversos.
Lo anterior significa un gran reto para el organismo electoral, sin embargo, la organización y el buen funcionamiento de las elecciones dependen no solo del árbitro, también de los partidos políticos, candidaturas, gobiernos y demás autoridades.
Ya que siempre habrá quien busque romper las normas, y para ello las diferentes autoridades deberán actuar y garantizar la paz y estabilidad.
Si bien todas y todos aspiramos a los escenarios deseables, no podemos descartar como en todo proceso político, que se presenten diversos actos que busquen desestabilizar nuestro sistema electoral.
Por ello, esta propuesta de reforma cuenta con diversas áreas de oportunidad, que es importante tomar en cuenta, como la etapa de recepción de paquetes y cómputos.
De ahí que se le dote de suficiencia presupuestaria al IEEH, para que pueda contar con espacios más amplios y seguros para realizar las actividades de recepción de paquetes electorales y los respectivos cómputos (de uno o varios municipios), así como el de una bodega adecuada para su resguardo.
También se podría ampliar de tres a cinco consejerías para los escenarios de recuento total. Ya que, si bien para este proceso se tendrían dos elecciones, llegará el caso, ya con la atinada reforma de empate electoral, que se tendrán que computar tres elecciones (gubernatura, diputaciones y ayuntamientos).
A su vez hay que considerar que el IEEH tenga la posibilidad de contar con personal para las actividades de oficialía electoral, actividad que durante un proceso intenso como es el de renovación de ayuntamientos, se dispara.
Y como lo he manifestado desde el liderazgo de la sociedad civil, debemos seguir apostando por la profesionalización y sobre todo por la eficiencia (capacidad de lograr los resultados deseados con el mínimo posible de recursos); la eficacia (capacidad para alcanzar un objetivo) y la legitimidad (consenso social), en todas las instituciones y espacios públicos. ¿Y ustedes, qué opinan sobre esta propuesta de reforma electoral?