La verdad es que no sabía quién era. Me enteré de él porque, en medio de la guerra que sostiene Israel contra Hamás, de pronto los noticieros le dedicaron mucho tiempo al suceso: Matthew Perry, un muy reconocido actor por su participación en la serie “Friends” fue hallado muerto en el jacuzzi de su casa en Los Ángeles California. El sarcástico y cómico “Chandler” que participó en las 10 temporadas de la serie, murió por ahogamiento a los 54 años.
En un libro que publicó a finales del 2022 escribió: "Mis amigos me llaman Matty... y debería estar muerto". Y no era para menos. Matthew llegó a ingerir hasta 55 pastillas diarias del narcótico “Vicodin”; al menos en 15 ocasiones tuvo que someterse a rehabilitación, y fue sometido a más de 12 cirugías debido a su problema con las adicciones.
En abril de este año el actor fue entrevistado por “LA Times”. Matthew dijo que él siempre había soñado con ser famoso, pero que cuando el sueño se hizo realidad, “lo que vivió fue un infierno”: "Estaba convencido de que esa era la respuesta. Tenía 25 años, era el segundo año de “Friends” pero desde los ocho meses me di cuenta de que el sueño americano no me estaba haciendo feliz, no estaba llenando los huecos en mi vida. La fama no hace lo que crees que hará. Era todo un truco", relató.
Matthew tenía razón. La fama no puede llenar los huecos en la vida de nadie. Tampoco lo hace cualquier otra cosa que este mundo pueda ofrecernos. Todos tenemos la tendencia a pensar que si logramos esto o aquello nuestra vida tendrá sentido, pero parafraseando al actor, “todo es un truco”.
En 1855 el predicador Joseph M. Scriven plasmó un escrito que daría luego pie a uno de los más famosos himnos del cristianismo. En sus estrofas iniciales dice: “¡Oh qué amigo nos es Cristo! Él llevó nuestro dolor, él nos manda que llevemos todo a Dios en oración ¿Está el hombre desprovisto de paz, gozo y santo amor? Esto es porque nos llevamos todo a Dios en oración ¿Estás débil y cargado de cuidados y temor? A Jesús, refugio eterno, dile todo en oración ¿Te desprecian tus amigos? Cuéntaselo en oración; en sus brazos de amor tierno paz tendrá tu corazón”.
Ven a Jesús tal como estás. Pídele que te perdone, salve y venga a morar a tu corazón. Él será tu mejor amigo. Nunca te dejará ni desamparará.