En Monterrey tenemos una mala calidad del aire gran parte del año y para ser honestos el gobierno del estado nada más hace como que hace, es decir, aparenta que algo hace ante el veneno que respiran nuestros hijos y nosotros, puras simulaciones.
No sabría cómo decirlo de otra manera, amigo lector, en ocasiones parece que somos espectadores de una mala comedia, donde los “genios” de la Secretaría de Desarrollo Sustentable reciben el problema de la contaminación del aire, lo evalúan y deciden que los autos viejos, sin afinación en el motor, son los culpables de todos nuestros problemas y compran un aparato portátil para imponer fotomultas a quienes echan humo.
Supongo que en esa secretaría cuando dan a conocer una medida como las fotomultas ambientales, salen de la rueda de prensa y todos victoriosos chocan las manos diciendo “¡sí, lo logramos!”. Y así es, lograron ocultar el verdadero problema.
Después la realidad los alcanza y la fotomulta no detiene las contingencias y anuncian un plan que destaca la prohibición de las fogatas en las construcciones… imagine usted, estimado lector, a los “genios”, una vez más, victoriosos chocando las manos diciendo “¡sí, lo logramos!”.
Luego de varios desatinos se da a conocer el estudio que todos esperábamos, el que realizó el Centro Mario Molina, que sin rodeos dice que la mayor fuente de contaminación en la zona metropolitana de Monterrey, más de la mitad proviene de las grandes industrias como refinerías, termoeléctricas y fundidoras, entre otras.
La otra parte de la contaminación viene de las fuentes móviles autos y camiones, pero son los camiones y tráileres los más nocivos en partículas menores a 2.5 micras, las que al respirarlas se meten al cuerpo y entran en la sangre.
Con el clima frío y la baja presión atmosférica llegan los días de contingencia ambiental y los “genios” en el gobierno resuelven promover la medida de Hoy No Circula.
Se resuelve que al decretarse una contingencia ambiental en una zona o municipio, los autos con terminación del día de la semana que corresponda no circularán. Sacarán al 20 por ciento de los autos en esos días, en esas zonas, y con eso el aire estará mejor (dicen ellos)… no sacarán de circulación a los autos de trabajadores y empresarios de la industria que se beneficia con los humos que contaminan; no, será toda la población, ¡uf!… seguro salieron de la rueda de prensa, chocaron victoriosos las manos y dijeron “¡sí, lo logramos!”.
Los autos como el de usted y el mío no representan ni el 30 por ciento del problema, pero ahora le quitarán su derecho a usarlo, no importa que tenga pagada su tenencia y esté en regla, usted no lo podrá usar.
El problema, amigo lector, es que cualquier día las empresas contaminantes llenarán de veneno el aire en la ciudad y usted no podrá mover su auto. Tendrá que pagar taxi o Uber o sufrirá en el transporte de los camiones, que en muchos sectores es malísimo.
¿No sería más fácil y con mayor beneficio suspender la operación de las industrias contaminantes en los días de contingencia ambiental?
“Quiero recordarles que las empresas que son fuentes fijas de contaminación, el 60 por ciento de las emisiones son de índole federal, la industria química, petroquímica, la de papel”, aseguró el secretario de Desarrollo Sustentable, Manuel Vital.
Entonces lo que falta es una buena gestión federal, decirle al Presidente que necesitamos su ayuda para que las empresas no enfermen y maten a nuestros hijos.
Entendemos que la presidencia no toma en serio al gobernador de Nuevo León, no le mandan fondos y pareciera que están esperando a que ya se marche.
Pero está faltando pericia y voluntad, porque como estrategia podríamos hacer pública la necesidad y hacer la solicitud al gobierno de AMLO… no pasa de que públicamente nos digan que no.
Ahora que nos van a multar por usar el auto cada vez que las industrias contaminan, es tiempo de voltear a ver a los verdaderos responsables de la contaminación: en las industrias, pero también en el gobierno… o usted, ¿qué opina?