Hace unos días se celebró un cónclave entre los actores más importantes del panismo poblano con su dirigente nacional Marko Cortés.
Con este encuentro se dirimieron algunas diferencias entre los diversos liderazgos y se aclararon las dudas, para poder avanzar en una estrategia sólida hacia el 2024.
A pesar de las corrientes a las que pertenecen, en este primer acercamiento llegaron a tres importantes conclusiones:
1.- Que el mejor perfil que puede competir por la gubernatura de Puebla, es indiscutiblemente Eduardo Rivera Pérez, el actual alcalde de la angelópolis. Incluso hasta la ex dirigente del PAN Genoveva Huerta estuvo de acuerdo. Marko Cortés reconoció que Rivera Pérez ha aceptado su interés por ser él quien encabece a la oposición para ganar el gobierno del estado a través de una alianza con el PRI y el PRD.
2.- Así como se reconoció que cuenta con los números y con las posibilidades de ser competitivo en la elección del 2024, también expresaron su deseo de que “Lalo” se muestre más ya que nomas no se mueve como quisieran, es decir, que esperan que adopte una postura más enérgica, más visible y más directa como ya lo hacen desde hace muchos meses los aspirantes de Morena, Ignacio Mier y/o Alejandro Armenta. En otras palabras, consideran que se ha visto muy pasivo.
3.- También se dejó en claro que la candidatura del gobierno estatal será para el PAN y el Ayuntamiento de Puebla de igual forma, a pesar de la narrativa que quiere imponer el PRI sobre condicionar su apoyo solo si le ceden la candidatura para la ciudad capital.
Lo cierto es que ya comienzan a analizar los perfiles y se tienen tres competidores serios para aparecer en la boleta: Mario Riestra Piña, Jorge Aguilar Chedraui y Ana Teresa Aranda, en ese orden.
La decisión del perfil que vaya por la capital debe reunir dos requisitos de inicio: tener buenos números en las encuestas y pertenecer a un grupo diferente al del candidato a la gubernatura para que así, todas las cofradías se sientan representadas.
Hasta el momento se sabe que el perfil que competirá en ambas posiciones será hombre. Ahora el siguiente paso es esperar los resultados en Coahuila y Estado de México para conocer el tipo de negociación que intentará el PRI poner sobre la mesa.
Por otro lado, también se barajan los planes B, donde Eduardo Rivera pueda ser la primera formula al Senado de la República entre otras decisiones de las que revelaré después.