Las autoridades mexicanas tienen leyes referentes al cuidado y tratamiento del agua acordes a la exigencia global, faltando la aplicación de las mismas sobre todo en regiones donde se hacen descargas a los ríos o el mar, lo cual les resolverá parte de la problemática actual en diversas regiones.
Para Wilfred Mohr, embajador de los Países Bajos en México, hay disposición de los tres niveles de gobierno en preservar el líquido y abonar a la conservación del medio ambiente, viendo desde la normatividad acciones muy similares a las planteadas en Europa como en el resto del mundo.
Apoyo el plan acordado entre Dutch Clean Tech y la Aistac de mejorar la infraestructura de suministro y drenaje, a fin de dotar el elemento tratado a plantas petroquímicas como de manufactura.
“Las leyes son la base de todo, pero de ahí sigue su implementación, ejecutarlas y seguirlas es muy importante, en México existen y lo que se debe hacer es aplicarlas. En Países Bajos existen leyes muy fuertes en este ámbito, las industrias y las ciudades necesitan aplicar la ley, en este caso tratar el agua que se descarga en los ríos o en el mar”, mencionó.

Consideró la situación como un fenómeno mundial, por eso su gobierno está interesado en apoyar a naciones y avanzar en este tema, al reconocer casos donde no se tiene el suficiente abasto para el campo, la industria y la población.
“El proyecto en Altamira es un pasó importante para la reutilización hasta cuatro veces del agua, procesos que pueden limpiarla muchas ocasiones. La escasez es una problemática muy general en México, ha sucedido en el norte pero también en la región centro”, añadió el diplomático.
En septiembre próximo se realizará una feria denominada “Agua Tech” en la Ciudad de México. Se discutirá con estados y empresas la manera de encontrar soluciones, al exponer los acuerdos logrados no solo en Tamaulipas, también en Estado de México y Quintana Roo.
Dicho pabellón se conformó tras la creación un consorcio de 10 empresas, incluida Dutch Clean Tech, involucradas en tratar el líquido, en la captura de la lluvia y en zonas inundables por los ríos desbordados.
