Si existiera una Ley de la Termodinámica aplicada a las corporaciones (no la hay, eso es un hecho), se podría pronunciar como “las empresas o se crean o se destruyen y solo algunas se transforman”. Muchas de las que se transforman, de pronto se meten a hacer cosas que están muy alejadas del core o su estrategia de negocios.
Los editores de think: act, que se define como la “revista global para los tomadores de decisiones”, definen perfectamente el fenómeno de la diversificación empresarial: “fabricantes de cervezas inician aerolíneas. Ingenieros que aprenden del arte. Pianistas que crían lobos. Rusia es ahora un paraíso turístico. Los samuráis escriben libros sobre estrategias del management”.
Así se trata la vieja práctica de la incursión en negocios distintos a los que componen el corazón de una empresa. Algunas veces se trata de una evolución necesaria, como cuando la finlandesa Nokia dejó atrás el negocio del papel, la pulpa y el cartón, y se metió a generar y vender energía, que luego dejó para convertirse en una firma de equipo de telecomunicaciones.
Para otras, este salto a la diversificación no es tan radical. Muy a lo Richard Branson, que de la música montó una línea aérea, restaurantes, y telefónica móvil, todo sin perder la esencia, que es la marca en sí.
México no está tan alejado de esta dinámica. En el mapa empresarial del país hay ejemplos muy firmes de cómo algunos conglomerados apuestan a poner sus huevos en varias canastas diversificadas.
Algunos como extensión de su negocio, otros (como todo el universo Carso, de Carlos Slim, que es omnipresente en cualquier nicho industrial o comercial).
Otros por necesidades nacidas de su estrategia (como Cemex, que quería fraguar un portafolio de empresas de la nueva economía, del cual lo único que quedó en concreto fue Neoris).
Y otros más porque de pronto, las nuevas realidades de la economía global y oportunidades que no preveían, los llevaron a senderos de negocios inexplotados, sobre todo en el campo energético (Peñoles y los campos eólicos, Alfa y Grupo Bal con el petróleo, Femsa y las gasolineras, etcétera).
“Si esa industria está a mitad de un cambio radical, eventualmente tendrás que desmantelar los viejos negocios. Si la industria enfrenta cambios incrementales, probablemente tendrás que reinvertir en tu negocio estratégico. La necesidad de entender el cambio en tu industria puede resultar obvio pero dicho conocimiento no siempre llega fácil. Las empresas malinterpretan las pistas y llegan a conclusiones erróneas todo el tiempo. Sotheby’s, por ejemplo, invirtió en subastas en línea (por medio de su propio sitio, además de una alianza con Amazon), como si internet fuera sólo un canal más cuando, en realidad, las nuevas tecnologías representaron un cambio fundamental en la estructura de su industria”, sentenció McGahan.
Las reconvertidas locales
En este tenor, en México hay incontables ejemplos de empresas que se reconvirtieron, que evolucionaron o que simplemente se diversificaron en otros campos, algunos relacionados otros no. Aquí una breve radiografía de algunas firmas.
Grupo Alfa
Manufactura, alimentos, telecomunicaciones y ahora energéticos.
Conglomerado
Ranking: 6 en las 500 de Expansión
Sede: Nuevo León
Ventas (2014): 229,000 mdp
Empleados (2014): 70,000 empleados
Pocas firmas a nivel global con una huella tan amplia en varios negocios. Del corazón industrial de Monterrey, ha pasado por diversas industrias y ahora su fuerte está en la manufactura, en los alimentos y en las telecomunicaciones.
Por vía de sus incursiones en la petroquímica, Alfa ha ampliado su cartera en negocios energéticos. Su subsidiaria Newpek es proveedora de petroleras en Estados Unidos y su subsidiaria Alfasid ha ganado contratos de servicios con Pemex.
En su momento, Alfa mostró interés en la apertura energética en México y delineó planes para entrar en las licitaciones de la Ronda Uno, analizando inclusive la compra de la canadiense Pacific Rubiales. La transacción no pegó, pero esto no quiere decir que Alfa no seguirá el negocio con sus otras subsidiarias.
Cemex
Cemento, TI y energía.
Materiales de construcción
Ranking: 8 en las 500 de Expansión
Sede: Nuevo León
Ventas (2014): 210,000 mdp
Empleados (2014): 44,000 empleados
Quien crea que Cemex sólo le hace al cemento, está equivocado. Desde la tacita de café que la empresa regiomontana se tomó en la época dorada del puntocom, Cemex siempre tuvo un rincón dedicado a la pasión de Lorenzo Zambrano: las tecnologías de información (TI). Así, desde su efímera PuntoComHoldings, lanzada hace casi tres lustros, a portales como Construmix, la firma tuvo siempre un as tecnológico bajo el brazo. Así nació en su seno: Neoris. La firma, 100% de Cemex, es considerada la mayor consultora en TI de América Latina. Cuando en México se habla de empresas como Softtek o Hildebrando como las mayores en su nicho de consultoría tecnológica o implementación de sistemas, se soslaya a Neoris, que factura unos 350 millones de dólares al año. Ahora, Cemex también quiere entrarle al tema energético y con Cemex Energía, busca fomentar inversiones en el sector al son de 3,500 millones de dólares en el mercado eléctrico.
Grupo Bimbo
Panes, vehículos eléctricos y energía solar.
Alimentos y consumo
Ranking: 10 en las 500 de Expansión
Sede: DF
Ventas (2014): 187,000 mdp
Empleados (2014): 129,000 empleados
Si alguien ha puesto sus panes en muchas bolsas, esa es Bimbo. La empresa ha invertido miles de millones en varios continentes y es considerada una de las mayores (sino la número uno) panificadoras del mundo. Si bien no la ha explotado como línea de negocio, Bimbo es una de las mayores empresas mexicanas apostando a los vehículos eléctricos. Un grupo de ingenieros bajo su nómina ha reconvertido casi 100 camionetas Nissan con una inversión millonaria. En una charola aparte, Daniel Servitje le ha entrado al negocio de la energía solar por medio de Aura Solar. Más que un pasatiempo, Servitje ve una veta relevante y quiere asegurar el futuro energético no sólo de Bimbo, sino de México. Un hito es la construcción de la mayor planta de energía solar de México, donde se canalizarán 100 millones de dólares en inversión inicial.
Grupo Bal
Nuevo Palacio y concesión en la Ronda Uno.
Retail, minería, servicios financieros, energía
Ranking: 17 en las 500 de Expansión
Sede: DF
Ventas (2014): 136,000l mdp
Empleados (2014): 56,000 empleados
Como sucede con las regia Alfa o la capitalina Carso, pocas empresas de estas dimensiones que pasen lista primero en el tema de la diversificación. En el caso de Bal, los Baillères han montado un negocio que va del comercio minorista de lujo (con El Palacio de Hierro) a los servicios financieros (GNP, Profuturo, ValMex), la minería (Peñoles, Fresnillo) y la energía (la propia Peñoles y Petrobal). En esta área, la empresa se mueve por varios frentes y destacan dos iniciativas: su inversión de 350 millones de dólares para desarrollar, junto con Energías de Portugal, un parque eólico en Coahuila. Y, con Petrobal, el grupo comenzó a ser parte de la nueva historia energética mexicana al haber obtenido una concesión durante la segunda fase de la Ronda Uno para explorar y desarrollar campos petroleros.
Femsa
De la tienda de conveniencia a la gasolinera.
Consumo
Ranking: 20 en las 500 de Expansión
Sede: Nuevo León
Ventas (2014): 109,000 mdp
Empleados (2014): 110,000 empleados
Por ahora, casi no hay una colonia sin un Oxxo. Con casi 14,000 puntos de venta, las tiendas de conveniencia le dieron un empaque inusitado a la fuerza que de por sí ya tenía Femsa como la mayor embotelladora de Coca-Cola y su enorme pie cervecero con Cuauhtémoc-Moctezuma (ahora con Heineken de socia). Además de su incursión en farmacias, Femsa Comercio también quiere ser una fuerza en el negocio de la venta de gasolina al público. Con vistas a competir con precio y marca fuerte una vez se liberalice el sector, Oxxo Gas ya tiene una presencia de 300 estaciones de servicio en 10 estados del país.
Grupo Salinas
Medios, banca, retail y ahora minería y energía.
Medios de comunicación, comercio, banca, minería, energía
Ranking: 21 en las 500 de Expansión
Sede: DF y NL
Ventas (2014): 108,000 mdp
Empleados (2014): 92,000 empleados TV Azteca, Banco Azteca, Elektra… el grupo casi no necesita carta de presentación en estas industrias de medios, banca y retail. Pero el inquieto Ricardo Benjamín Salinas Pliego también extiende sus tentáculos en varios frentes, sobre todo los relacionados con las riquezas en el subsuelo. Así, el empresario formó Grupo Invecture, al cual el gobierno le dio una concesión para explotar una mina llamada Los Cardones en Baja California Sur. Por otra parte, su Grupo Dragón recién ganó un contrato por 2,600 millones de pesos para operar un campo de geotermia en Nayarit y generar energía eléctrica. En el terreno de las desgracias, cabe recordar que por medio de Typhoon Offshore el empresario participa en la proveeduría de servicios a Pemex. La firma de Salinas es dueña de la plataforma Troll Solutions, que renta a Pemex y que en mayo de este año registró un siniestro que ocasionó la muerte de dos trabajadores e hirió a 10 más.
Alsea
Del café a la ropa.
Alimentos, comercio
Ranking: 108 en las 500 de Expansión
Sede: DF
Ventas (2014): 23,000 mdp
Empleados (2014) 57,000 empleados
La operadora de restaurantes y cafeterías (Domino’s Pizza, CPK, Vips, Starbucks…) quiso aprovechar su conocimiento de los segmentos de clase media alta y alta de México y por medio de una adquisición de parte de Grupo Axo entró al negocio del mercado de ropa de lujo. Axo maneja marcas como Brooks Brothers, Emporio Armani, Coach, Sephora, etcétera. Aunque Alsea se llevó ya un raspón (Cofece la multó por no notificar a tiempo la adquisición de 25% de Axo), la firma de los Torrado, que también han invertido en medios de comunicación, quiere avanzar en nuevos terrenos.