En octubre, la actividad económica de México tuvo un retroceso de 0.2 por ciento comparado con el mes inmediato anterior, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Al presentar el Indicador Global de la Actividad Económica (Igae), que permite ver de forma anticipada el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), el Inegi precisó que se trata del tercer retroceso mensual consecutivo y el séptimo en los 10 primeros meses del año.
Según los datos, en octubre, y comparado con el mes inmediato anterior, las actividades primarias tuvieron una disminución de 1.2 por ciento; las secundarias avanzaron 0.6 por ciento y las terciarias disminuyeron 0.5 por ciento.
A su vez, el Igae, comparado con el mismo mes, pero del año pasado, mostró un avance de 0.3 por ciento.
En este sentido, en su comparación anual, las actividades primarias tuvieron una caída de 3.2 por ciento; las secundarias aumentaron 1.6 por ciento y las terciarias se mantuvieron sin cambio alguno.
Analistas de Monex indicaron que con el resultado dado a conocer esta mañana, es factible que el PIB tenga un avance de 5.5 por ciento.
“Ahora, el escenario más probable es que el PIB crezca en un orden de 5.5 por ciento durante todo 2021, cifra que coincide con uno de nuestros pronósticos iniciales del año, previo a que lo revisáramos al alza en función del poderoso desempeño de la economía estadounidense”, dijo la institución.
Refirió que, de esta manera, “el giro en la situación se entiende a partir de un desgaste en los fundamentales internos, especialmente a partir del surgimiento de la tercera ola en julio, pero cuyo efecto podría ser más permanente que lo estimado”.
Por su parte, analistas de Ve por Más (BX+), señalaron que pese a las cifras de hoy, todavía se anticipa un modesto rebote en la actividad para el cuarto trimestre del año, ante la baja en contagios, menos obstrucciones en la industria y la disipación de las distorsiones por los cambios en materia laboral.
“Estimamos que el PIB crecerá 2.6 por ciento en 2022, conforme el control de la pandemia permite que la oferta y la demanda sigan normalizándose, e impulsada por la sólida expansión de Estados Unidos. La desaceleración respecto a 2021 refleja, por un lado, la disipación del “efecto rebote”, y, por el otro, la erosión del crecimiento potencial de la economía, derivado de los bajos niveles de inversión observados incluso desde antes de la crisis pandémica”, dijeron.
BX+ agregó que “el panorama es incierto y preocupa que el alza en contagios en unas regiones y la nueva variante del virus agudicen los cuellos de botella en la producción y vuelvan a distorsionar la movilidad y los patrones de consumo, cuestión que afecta más al sector servicios”. En octubre, la actividad económica tuvo un retroceso. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Indicador Global de la Actividad Económica (Igae).