El Tecnológico de Monterrey estima que el panorama económico para el 2021 es menos sombrío que lo vivido durante el año en curso; sin embargo, considera que el país debe enfrentar satisfactoriamente una serie de retos para lograr niveles de crecimiento económico superiores a los obtenidos a lo largo de los últimos 30 años y para ello es muy importante evitar que la confianza empresarial continúe deteriorándose.
El coordinador de Análisis e Investigación en Economía y Negocios del Tec de Monterrey, Región Ciudad de México, Héctor Magaña, señaló que resulta imperativo dotar a los empresarios de un clima de negocios con certidumbre legal y de seguridad porque de lo contrario, será muy complicado que los inversionistas arriesguen su capital creando nuevos proyectos y que estos a su vez se traduzcan en empleos de calidad.
En sus proyecciones, estima que el producto interno bruto (PIB) de México terminará 2020 con una contracción entre 8.5 y 9 por ciento; para 2021, proyecta una recuperación en terreno positivo, al alcanzar un nivel de crecimiento entre 2 y 3 por ciento.
Mejorar la productividad
No obstante, añadió Magaña, en el país también se debe buscar mejoras en la productividad, pues una caída restará atractivo al país como destino de flujos de capitales extranjeros, ante una competencia cada más feroz por atraer inversión foránea, ya que las grandes economías buscarán generar estímulos para evitar que los empresarios inviertan en un país extranjero y se queden en su lugar de origen para fomentar el empleo local.
Lo anterior, abundó, tendría un impacto severo en el mercado laboral nacional de tal forma que la recuperación del empleo esperada para 2021 ocurriría del lado del sector informal y se tendría poco margen de maniobra para enfrentar adecuadamente el problema de la precarización laboral a través de la creación de empleos de calidad.
srgs