El campo de migrantes de Moria, en la isla griega de Lesbos, fue parcialmente evacuada debido a un incendio desatado el miércoles de madrugada, informaron los bomberos griegos.
Según los bomberos, unos "incendios dispersos en los prados de alrededor del campamento pero también en el interior de la estructura" movilizan a 25 bomberos y 10 vehículos para evacuar el campamento más poblado de Europa, con casi 13 mil migrantes.

Según testigos en el lugar, "casi todo el campamento está en llamas, tanto en el interior como en las tiendas de campaña del exterior, en el olivar".
"Los solicitantes de asilo huyen del campamento a pie en dirección al puerto de Mitilene, pero los bloquean los vehículos de las fuerzas de seguridad", añade.
Stand by Me Lesvos, una asociación que agrupa a lugareños y refugiados, se ha alarmado en Twitter: "Todo está ardiendo, la gente huye". “Algunos testimonios afirman que los habitantes bloquean el paso (de refugiados) en el pueblo vecino”, agrega.

Según la agencia de prensa griega ANA, los incendios habrían comenzado tras la revuelta de algunos solicitantes de asilo que iban a ser puestos en aislamiento, porque dieron positivo por coronavirus o estuvieron en contacto con una persona contagiada.
Mientras, el Ministerio de Migración, destacó en un comunicado que por primera vez, el número de las llegadas de migrantes a Grecia es inferior al de deportaciones y devoluciones voluntarias a su país de origen.
Según los datos que facilitó el Ministerio, entre junio y agosto entraron en Grecia 2 mil 076 migrantes, mientras fueron deportados, devueltos voluntariamente a sus países de origen o trasladados a otros países europeos 2 mil 736.

Registran 35 casos de coronavirus en campo de Moria
Las autoridades sanitarias griegas han detectado en total 35 casos de coronavirus en el campo de refugiados de Moria, entre las personas que tuvieron contacto con el primer contagiado registrado en ese centro. Entre las 35 personas infectadas, solo una presentaba síntomas y todas han sido trasladadas a un área especial de aislamiento dentro del campo, añadió el Ministerio en un comunicado.
El Ministerio de Migración informó durante el martes de que en total se han tomado pruebas a 2 mil personas de las cerda de 13 mil que viven en el campo, mil 900 migrantes y 100 empleados. La Organización Nacional de Salud Pública (EODY) ha terminado así el rastreo de todas las personas que entraron de alguna manera en contacto con el paciente cero, un somalí de 40 años.

El hombre, que ya tiene el estatus de refugiado, se había marchado a Atenas, pero al no encontrar trabajo regresó al campo y se instaló en una carpa en el olivar que rodea la zona organizada, un área extensa en el que viven más migrantes que dentro del recinto cerrado.
El campo fue inmediatamente puesto en cuarentena y hasta el 15 de septiembre no puede salir ni entrar nadie, con excepción del personal sanitario. Las autoridades pusieron asimismo en cuarentena, hasta el 21 de septiembre, los centros de acogida de Sjistó, Malakasa y Eleonas, en la región capitalina de Atica, tras la aparición allí de varios casos: tres en el primero, dos en el segundo y uno en el tercero.

Una veintena de organizaciones humanitarias, griegas e internacionales, entre ellas Boat Refugee Foundation, Help Refugees, Solidarity Now y el Consejo Griego para los Refugiados, denunciaron hoy en comunicado conjunto las malas condiciones de vida en los campos, la ausencia de medidas de integración para los refugiados y la mala gestión gubernamental de la crisis.
"El aumento de la presencia policial no protege de la propagación del virus, tampoco garantiza la seguridad de los refugiados y de los trabajadores en el campo", destacaron las ONG, recalcando que "la prueba más dura del fracaso de la política gubernamental son las centenares de personas... que buscan desesperadamente refugio en espacios públicos sin el menor apoyo del Estado, ni siquiera para comprar comida y agua".
Las ONG reclamaron la evacuación de la población de alto riesgo de instalaciones superpobladas, así como su reubicación en viviendas seguras y adecuadas. Asimismo, recordaron que la solución pasa por compartir responsabilidades en la Unión Europea, con fuerte compromiso con la reubicación por parte de los estados miembros, basado en la solidaridad dentro de la Unión.
Sin embargo, se han multiplicado las denuncias de organizaciones humanitarias de que la Guardia Costera griega, en vez de rescatar a las personas que intentan llegar a las islas del Egeo, procede sistemáticamente a devoluciones en caliente a Turquía, lo que podría explicar parcialmente este descenso, además de las dificultades derivadas del coronavirus.
dmr