El gobernador de Florida, Ron DeSantis, aseguró a los conductores de su estado que no serán responsables si atropellan a manifestantes —en contra de las redadas migratorias— que bloquean las carreteras del estado.
De acuerdo con el medio The Hill, el republicano expresó en un pódcast que “si conduces por una de esas calles y una turba viene, rodea tu vehículo y te amenaza, tienes derecho a huir por tu seguridad; por lo tanto, si te vas y atropellas a una de estas personas, es su culpa por agredirte”.
DeSantis aseguró que “no tienes que quedarte ahí sentado, ser un blanco fácil y dejar que la turba te saque del coche y te arrastre por las calles; tienes derecho a defenderte en Florida”, añadió.
El republicano elogió el trabajo anterior de las fuerzas del orden en Florida para dispersar rápidamente a multitudes.
“No tienen derecho a tomar las calles”, dijo DeSantis, porque “está mal y tiene un impacto enorme en la calidad de vida” de las personas.
“Tenemos una política de tolerancia absolutamente cero para eso”, añadió.
En tanto, el fiscal general de Florida, James Uthmeier, anunció este jueves un programa para proteger a los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) de los manifestantes, y avisó que el estado “no tolerará” protestas como las que suman casi una semana en Los Ángeles.
“No somos California, no permitimos los disturbios en el estado de Florida; han pasado cuatro o cinco años desde que la senadora Debbie Mayfield y su equipo pasaron la Ley Antidisturbios en Florida. Como siempre, somos proactivos”, declaró el fiscal en una rueda de prensa.
El funcionario lanzó la advertencia en vísperas de las primeras manifestaciones convocadas este fin de semana contra ICE y el cumpleaños de Donald Trump, quien el sábado hará un desfile militar en Washington para conmemorar los 250 años del ejército.
Recordó que Florida aprobó la Ley para Combatir el Desorden Público en 2021, tras las manifestaciones por el asesinato de George Floyd, que criminaliza los disturbios, aunque asociaciones civiles argumentan que restringe el derecho a manifestarse.
MO