Los niños norcoreanos volvieron hoy a las aulas con cubrebocas, después de meses de cierre de las escuelas como parte de las medidas impuestas contra la pandemia del coronavirus.
Pyongyang no ha informado de ningún caso de la enfermedad covid-19, de lo que dudan los expertos tomando en cuenta que el virus apareció en la vecina China y se propagó a todos los continentes.
Sin embargo, Corea del Norte tomó drásticas medidas, cerrando sus fronteras e imponiendo confinamiento.
El nuevo trimestre escolar, que debería haber comenzado a inicios de abril, fue varias veces aplazado. A mediados de abril, se autorizó a algunos colegios de secundaria y universidades a recibir alumnos.
Los alumnos de primaria volvieron hoy a clases, con mascarilla quirúrgica desechables o de tela y flores rojas.
En una escuela en Pyongyang, se tomó la temperatura a los niños, con sus mochilas en la espalda, antes de entrar a clases.

En el aula, antes de sentarse en su pupitre, formaron filas para lavarse las manos con agua depositada en unos cubos rojos.
"Tienen que frotarse las manos", les decía la maestra.
Los estudiantes llevaban sus mascarillas en clase, pero se sentaron cerca uno de otros para escuchar a su profesora, quien también llevaba e rostro cubierto.
Retratos del fundador de Corea del Norte, Kim Il Sung, y de su hijo y sucesor Kim Jong Il -abuelo y padre del actual líder Kim Jong Un- cuelgan de las paredes de todas las aulas del país y los "estudios revolucionarios" son una parte clave en el programa escolar.
Los analistas consideran poco probable que Corea del Norte haya evitado infecciones por el virus, y que su deficiente sistema de salud podría tener dificultades para hacer frente a un brote grave.
La pandemia ha causado 380 mil muertes en todo el mundo y se han diagnosticado oficialmente más de 6.3 millones de contagios en 196 países y territorios.
jamj