Conocido por ser un lugar donde se come buen marisco, entre otras cosas, el restaurante madrileño Bálamo inauguró Gran Reserva, un espacio dedicado a los amantes del vino, donde se puede disfrutar de todos los vinos del Grupo Bornos.
Todo esto en una superficie de cinco mil metros cuadrados, donde la zona Gran Reserva, que se encuentra en el interior del restaurante Bálamo, ofrece hasta 267 referencias de vino en la carta. De esta manera, el amante del vino puede paladear La Caprichosa, de Palacio de Bornos, Lleiroso, de Ribera del Duero, Bucrana, de Toro, sin faltar el excelente y moderno rosado Viñedo cinco de Señorío de Sarría, por citar algunos, todos ellos del Grupo Bornos.
Situado en la calle Cooperación, 11, de Alcorcón (Madrid), el restaurante Bálamo ofrece en Gran Reserva un nuevo concepto de 19 espacios exclusivos, es decir, reservados inspirados en diferentes bodegas, pensado para reuniones con amigos y familiares, comidas de empresa y hasta para pedidas de mano. Todo ello, precedido de una alfombra roja y una ambientación de buen gusto.
Cada uno de los 19 reservados cuenta con un nombre propio en honor a una determinada bodega, entre ellas Grupo Bornos, y varían en cuanto a su aforo —algunos son para diez personas, ocho o seis—, el cual se puede ir adaptando. Asimismo, todas estas salas disponen de una acústica optimizada para la privacidad y una enorme pantalla en la que se cuenta la historia de cada bodega.
Para acompañar con el vino, se puede comer, por ejemplo: raciones de embutidos, ensaladas, quesos, boquerones y calamares. En cuanto a los pescados, sirven merluza, corvina, bacalao al ajillo, rape y lenguado. También hay arroz y pasta y no puede faltar la carne: chuletitas de lechal, lomo alto de vaca y Black Angus.
Gran Reserva pretende llegar a todos los bolsillos y a todas las personas
Óscar García, CEO y propietario del lugar, señaló que “se trata de que el cliente tenga una gran experiencia y un buen momento. Intentamos llegar a todos los espacios, a todos los bolsillos y a todas las personas. Tenemos unos precios muy competitivos, una calidad-precio muy razonable y todo esto es para hacer que la gente vuelva”.
En cuanto a los reservados de la nueva zona Gran Reserva, contó que “lo que hemos buscado es el ruido cero-cero. Nosotros lo que creemos es que la gente cada vez quiere menos ruido. Queremos más privacidad, queremos más exclusividad y queremos estar en un entorno a gusto con las personas que queremos”.
Gran Reserva también cuenta con la denominada sala de fiesta, donde se puede comer y beber tranquilamente e incluso bailar. Un sitio especial que hace del restaurante Bálamo una de las mejores opciones para los amantes de la buena comida y el buen vino.
IYC
